Los docentes exigen conocer el primer borrador de la Ley
Entre todas las medidas anunciadas hasta ahora desde el Ministerio de Educación y Cultura por el gabinete de Pilar del Castillo es, sin duda, la supresión de la promoción automática la más aplaudida por la comunidad educativa, sobre todo por los profesores.
Según Julian Martínez y Rafael Coloma Gil, presidente y secretario de la Asociación Nacional de Catedráticos de Bachillerato, (Ancaba), la Reválida o prueba externa de Estado “no es la tarta sino la guinda del pastel. Instaurar un control así no es volver atrás sino acompasarnos a los comportamientos de evaluación de la Educación que están en uso en Europa”, señalan.
Sin embargo, la opinión general es que la Reválida en sí misma no produce calidad, aunque sí sea una medida en busca de una mayor exigencia en la enseñanza y el aprendizaje para conseguir mejores resultados y acercarse a la excelencia del sistema educativo.
Homologable a Europa
Así, la PGB o Reválida refleja o refrenda la calidad del sistema educativo previo. De ahí que la prueba deba ser homologable en todo el Estado español, en todas las CCAA y homologable también en exigencia a Europa. En este sentido, el presidente de la Asociación Nacional de catedráticos de Bachillerato (Ancaba), Julian Martín, afirma que “si en este momento se hiciera la prueba con parámetros europeos quedarían al descubierto todas las vergüenzas de nuestro sistema”.
Pero no todo son palmaditas en la espalda para el equipo de gobierno del Ministerio de Educación y cultura. Si la Reválida es apoyada por la mayoría de los docentes por ser una manera de “evitar que los centros den notas muy generosas”, como afirma entre otros docentes Carmen Guissán, catedrática de Economía de la Universidad de Santiago, los expertos en Educación también coinciden en la necesidad de de establecer un gran pacto por la Educación cuanto antes para no estar haciendo reformas importantes en el sistema educativo constantemente.
Algunos profesores del IES “Pío Baroja”, de Madrid destacan que es aberrante y vergonzoso cómo se está desarrollando el debate sobre la reforma de las leyes de Educación en general ya que “se deben adoptar decisiones lo más consensuadas posibles porque, al final, si no, los más perjudicados van a ser los alumnos”.
Sí a la repetición
En cuanto a la supresión de la promoción automática los profesores son claros. “En la Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) se debería establecer un máximo de dos materias suspendidas para pasar de curso”, señala Eduardo Calderón, profesor de Filosofía y secretario general de la Unión Canaria de profesores licenciados, Eduardo Calderón. Para éste “se debería restablecer, además, la convocatoria de septiembre en todos los cursos de ESO y del Bachillerato y se deberían establecer itinerarios a partir de 3º de la ESO en función de la capacidad e intereses de los alumnos”.
Itinerarios diversos
Sin embargo, la cuestión de los itinerarios es objeto de discusión y polémica entre los expertos en Educación. Si la idea de constituir la Garantía Social como un tipo más de formación reglada ha sido bien acogida entre profesores y titulares de centros, no lo es tanto la cuestión de si todos los centros tendrían que ofertar por Ley todos los itinerarios establecidos. Para Inés Garrido, profesora de Filosofía del IES “Araujo”, de Fuenlabrada, “la mayoría de los centros tiene ahora un abanico de optatividad grande, pero no se puede legislar esto en una Ley marco. Al igual que los institutos han ido implantando y ofreciendo los distintos tipos de Bachillerato LOGSE los centros irán implantando una optatividad mayor en función de la demanda y de sus posibilidades”.
No obstante, son muchos los docentes que prefieren no pronunciarse hasta no conocer un primer borrador oficial con las bases de la Ley de Calidad ya que, aunque aplauden casi todas las medidas anunciadas desde el Ministerio de Educación y Cultura, son cautelosos a la hora de opinar porque “las medidas son positivas pero habrá que esperar para ver como se concretan”, concluye Garrido.
José Manuel Vega Pérez, presidente de la Asociación Europea de Enseñantes, AEDE: “Es imposible que todos los centros ofrezcan todos los itinerarios”
“No hay que temer a los cambios así que, si la Ley hay que cambiarla cada 15 años pues se hace y ya está. La pena es que el momento político que vivimos, cuando quedan menos de dos años para las próximas elecciones, impide el consenso y la firma de un pacto de Estado por la Educación, que sería lo ideal”. Para el presidente de AEDE lo importante es que se evalúe no sólo a los alumnos, sino también a los profesores y a los centros. “Estoy a favor de la reválida siempre que sea una prueba que sirva para ayudar y orientar a los alumnos”, comenta. En cuanto a la supresión de la promoción automática Vega opina que ”cuando todo se da gratis no se le da valor a las cosas. Alumnos y profesores deben competir para mejorar el rendimiento”. Sin embargo, Vega cree que quizá la elección de itinerarios vaya a hacerse demasiado pronto. “También hay razones económicas en la reforma”, concluye.
José Luis Negro, presidente del Colegio de Doctores y Licenciados: “Urge desarrollar un curso puente entre la FP de primer grado y la de segundo”
“Creo conveniente la implantación de una prueba al finalizar la Secundaria tal y como sucede en muchos países europeos porque estimulará positivamente el esfuerzo de los alumnos por estudiar y de los profesores por prepararlos. Lo lógico para los estudiantes es que estudien y realicen pruebas para comprobar su aprovechamiento”, explica el presidente del CDL.
En cuanto a la repetición de curso, según José Luis Negro, debe entenderse como una “oportunidad de alcanzar los objetivos programados para cada curso y asegurar con éxito los siguientes”. Sin embargo, la reforma más urgente y necesaria a juicio del presidente del Colegio de doctores y licenciados es la de ”desarrollar el curso puente entre la Formación Profesional de primer grado y la de segundo para evitar el bloqueo del sistema educativo en las enseñanzas de tipo profesional tal y como ocurre actualmente”.