El curso arranca en País Vasco y Canarias

Autor: Marta SERRANO

No es septiembre un mes cualquiera. El inicio del curso 2006-07 viene marcado en esta ocasión por la reciente aprobación y puesta en vigor de la Ley Orgánica de Educación (LOE). Y es que aunque faltan por aprobar los currículos de contenidos que desarrollarán la ley de la antecesora de Mercedes Cabrera, la nueva norma obliga a los profesores en cierto modo a cambiar el chip para adaptarse a las variaciones tanto en las competencias que deben adquirir los alumnos como en los parámetros de su evaluación.
La reforma también supondrá cambios en el sector de los libreros, porque hay que adaptar los textos a las nuevas enseñanzas previstas. Dichos cambios no son nimios, ya que supondrán para las editoriales un gasto adicional de 160 millones de euros en tres años según los cálculos de la Asociación Nacional de Editores de Libros y Material de Enseñanza (Anele).
Este coste, que se sumaría a la inversión ordinaria, está calculado para el conjunto de todas las editoriales que actualmente publican libros de texto de Educación no universitaria, según ha explicado Mauricio Santos, presidente de Anele.
El gasto, según Santos, sería mayor para el segundo de los tres cursos en que se implantarán progresivamente las nuevas enseñanzas de Primaria, Secundaria Obligatoria y Bachillerato: 2007-08, 2008-09 y 2009-10. «Los libros se han de rehacer totalmente y no creo que se pueda aprovechar casi nada de los actuales», recalcó. Para el presidente de Anele la LOE significa un cambio no baladí en la concepción de los libros porque se introduce un elemento «muy novedoso»; las competencias básicas (que supone aprender a aprender así como el dominio de la lengua hablada, escrita y leída, de las Matemáticas y de una lengua extranjera), lo que «modificará el planteamiento de los libros» y contribuirá también a aumentar la confusión entre familias y profesores. Pero según Santos, habrá que saber cuántas editoriales se van a «atrever» a acometer la reforma de los libros por la extensión del sistema de préstamo de los textos escolares en muchas comunidades autónomas, ya que durarán cuatro años, hasta que haya que renovar los contenidos, y las ventas se irán limitando a ese momento.

Calendario lectivo

Por lo demás, el 2006-07 arranca con los centros de enseñanza con el calendario escolar en la mano. Como viene siendo la tónica general, parece que las horquillas que marcaban las fechas de inicio y final del curso han pasado de moda y en la mayor parte de los casos se fija un día concreto tanto para el retorno a las aulas como para finalizar el curso. Éste varía, eso sí, según las provincias de una misma comunidad, e incluso según los centros en cada provincia por necesidades o festividades locales y gracias a la mayor autonomía de los centros.
Los primeros alumnos de Infantil y Primaria en volver a clase son los de País Vasco, Canarias y La Rioja, ya que lo hacen el día 8 de septiembre. Llama la atención además que los más pequeños del País Vasco, junto a los niños navarros no acabarán el curso hasta el 30 de junio del próximo año.
De nuevo como en el curso pasado los alumnos de Infantil y Primaria de Andalucía y Baleares serán los últimos en empezar.
En lo que respecta a los alumnos de Secundaria, Bachillerato y Ciclos Formativos destaca igualmente el caso del País Vasco, donde los alumnos también retomarán los estudios el 8 de septiembre y no acabarán hasta el 30 de junio. Por el contrario, en Cantabria y en ambas castillas los alumnos de Secundaria no comenzarán hasta el 18 o el 19 de septiembre, acabando en torno al 27 de junio.

 La vuelta al cole supone más de 800 euros  
Un estudio de la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (FUCI) señala que la media de lo que cuesta equipar a un niño para su vuelta al colegio está en los 816 euros, aproximadamente un siete por ciento más que el curso pasado. Según la FUCI, la ropa, el calzado y los libros suponen el gasto más elevado al comienzo del curso, y a ellos hay que añadir el comedor, el transporte y la matrícula de ingreso.
Para ahorrar hasta un 30%, la FUCI recomienda a las familias prescindir de las marcas en la medida de lo posible. Los libros de texto suponen un coste medio de 170 euros, aunque cada vez son más las comunidades autónomas que conceden ayudas por este concepto o bien cuentan con programas de gratuidad total. A todo esto hay que añadir el coste del material (mochila, lápices, bolis, cuadernos…), que puede superar los 100 euros; el de la comida, que oscila entre los 65 euros de un colegio público y los 150 euros de un centro privado; y el transporte, cuyo coste se sitúa entre los 60 euros y los 120 euros.
No obstante, los niños cada vez tienen un rol más activo en las decisiones de compra y los gastos efectuados por el inicio de curso según un estudio elaborado por el Foro Infantil y Adolescente (FIA). El presidente de dicho Foro, Miguel González, explica además que cada vez es más numerosa la publicidad de estos productos dirigida a los menores en vez de a sus padres y el hecho de que se pidan una marca determinada puede hacer que el regreso a las aulas sea un 30% más caro.