Nuevas movilizaciones de los estudiantes chilenos de Secundaria

Ésta fue la cosecha de un nuevo llamamiento a la movilización por parte de los estudiantes secundarios chilenos, conocidos también como pingüinos por razón de su uniforme: camisa blanca y corbata oscura.

¿Razones? El no cumplimiento o la demora de los compromisos adquiridos por la presidenta Michelle Bachelet en el primer semestre del curso escolar en Chile, cuando los pingüinos lograron movilizar a todo el país con el fin de mejorar las condiciones de los estudiantes.

 

 

Faltan menos de dos meses para que concluya el año escolar en el país andino, algo que preocupa a los alumnos de Secundaria, ya que no ven avances significativos en las promesas del Gobierno.

Para ellos, el hecho de que el Consejo Asesor de Educación vaya a terminar su informe que dé vía libre a las mejoras justo el 11 de diciembre, con el curso caso terminado, indica una estrategia para terminar el conflicto cuando no haya nadie para poder movilizarse o reclamar. Así opina Maximiliano Mellado, presidente del Centro de Alumnos del Liceo Manuel Barros Borgoño, en Santiago de Chile, y portavoz de los estudiantes.

Mellado también indicó que la última manifestación es una advertencia «de lo que se puede venir en las próximas semanas» ya que, añadió, el Consejo Asesor (cuerpo colegiado encargado de entregar soluciones al conflicto) «no nos sirve de nada».

Los estudiantes demandan lo mismo que hace unos meses: aumento en cantidad y calidad de las raciones alimenticias que se dan a chicos de escasos recursos, subvención en el pago de los derechos para hacer el examen de acceso a la universidad (cerca de 40 dólares americanos, en contraste con un sueldo mínimo de 250 dólares) y beneficios en el transporte público. También exigen que se derogue la actual ley de educación (LOCE), heredada del gobierno del general Pinochet que, entre otras cuestiones, diseñó un sistema administrativo dependiente de los municipios en lugar del Estado.