"La crisis hará que la Educación privada se convierta en elitista"

Autor: Adrián ARCOS

La palabra “libertad” aparece constantemente en todos los congresos de CECE. En el de este año, que se está celebrando durante esta semana en Cádiz, no sólo aparece, sino que es el tema principal en torno al cual giran las jornadas. De hecho, se ha elegido Cádiz como ciudad emblemática que representa la libertad. La presidenta de la CECE nos dice lo que entiende ella por libertad y nos muestra su preocupación por los momentos que estamos viviendo de crisis.

El Congreso, una vez más, pide una “Educación en libertad”. ¿Falta libertad en el plano educativo?
Lo que hay es una manipulación política que afecta y ataca a la libertad a través de la Educación. Muchas veces, más que libertad, hay libertinaje. La libertad nosotros la asociamos al respeto a las libertades que establece la Constitución, sin manipulación. Educación en libertad supone respetar las libertades de centros educativos y familias, y el Gobierno tiene que garantizar que los padres elijan el centro educativo, la formación religiosa y moral exactamente de acuerdo con sus propias convicciones. Y la Constitución también dice que la Educación obligatoria es gratuita y no dice que sea exclusivamente en los centros públicos.

¿Y se respeta la libertad de los centros privados?
Las leyes educativas se plantean con un matiz político. Cada vez se van poniendo más cortapisas para que los centros privados funcionen con autonomía. Con el mero hecho de establecer condiciones que se van a baremar con puntos para que las familias puedan escoger ese colegio, se olvida lo primordial, que la familia elija ese centro porque se adecua a lo que ellos entienden que debe ser la Educación para sus hijos. Pero van a primar cuestiones como si la familia vive próxima al centro educativo o cuáles son las condiciones económicas. Es completamente absurdo que en un centro público pueda ir la hija de un banquero de forma gratuita y que en un centro concertado los ingresos de las familias sean una baremación negativa para que se pueda elegir ese centro.

¿Cómo va a afectar la crisis a la enseñanza privada?
Hay tendencia a creer que un centro privado-concertado tiene asegurados unos ingresos. Tanto el centro privado como el concertado van a tener que apretarse mucho el cinturón para que las familias continúen en los centros. Y no va a ser por falta de deseo de las familias, sino porque los endeudamientos y la situación económica van a hacer que la familia tienda a la enseñanza pública como solución.

¿Tendrán más ventaja los concertados que los  privados?
Los conciertos no cubren el coste real de un centro educativo privado. El centro concertado se convierte en una sucursal de los centros públicos, ya que se compromete a enseñar con el precio que quiera la Administración y queda supeditado a una legislación durísima. Son mucho más baratos para la Administración que mantener un centro público. Además, si hay crisis familiar, la voluntad de ayudar al centro para que cubra los gastos va a desaparecer. La crisis va a afectar cada vez más a las familias y la empresa privada va a verse obligada a afrontarla.

¿Son realmente conscientes las familias de la crisis?
Para nada. La Educación va a ser una necesidad, pero si en una familia dejan de entrar los ingresos necesarios para comer o de pagar la vivienda, es evidente que no puedan aportar dinero al centro educativo. Va a haber menos ingresos y los centros van a pasarlo mal. La crisis va a provocar que la Educación Privada se convierta en elitista, porque sólo las familias con más dinero van a poder llevar allí a sus hijos.

¿Es algo inminente? ¿Se notan ya las consecuencias?
Claro. Por ejemplo, las familias con tres o cuatro hijos están planteando en los centros educativos, que si trabajan los dos no les es posible buscar a los niños al mediodía. Y por su situación económica, lo que piden es volver a algo que se planteó en torno a los años 80, que consistía en llevar su comida desde casa, ya que no pueden permitirse pagar el comedor. Y en ese momento los centros lo aceptaron, ya que era una forma de solucionar que los alumnos pudieran seguir en el colegio.

¿Tendrán más ventaja los concertados que los  privados?
Los colegios nunca van a ser más baratos de 400 euros. Y a eso únele transporte, comedor, todos los condicionantes, porque los grandes colegios que están en las zonas periféricas de las ciudades cuentan con que el alumno va a estar un día entero. La familia va a tener que eliminar todo aquello que consideraba complementario para la formación de los hijos, actividades deportivas, artísticas… Por lo tanto, el alumnado que quede en los centros privados será de familias con alto poder adquisitivo, ya que los costes se tendrán que sufragar aumentando las cuotas a esas familias, que son las que podrán asumirlo.