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“No hay una receta mágica para alcanzar un Pacto educativo”

La Región de Murcia, con la firma de su segundo Pacto Social por la Educación, se ha convertido en un ejemplo a seguir en el actual escenario en el que tanto se habla de un gran Pacto de Estado.

Pablo RoviraMartes, 19 de enero de 2010
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El segundo Pacto Social por la Educación de la Región de Murcia alcanzó aún más adhesiones de agentes sociales y educativos que el de la anterior legislatura. Una voluntad de diálogo justo en una autonomía en la que el Gobierno regional goza de una mayoría absoluta más holgada.

Murcia ha conseguido lo que tanto se habla pero nadie consigue, es decir, un Pacto por la Educación. ¿Qué le parece?
Lo cierto es que nos llena de satisfacción haber logrado este acuerdo histórico. Siempre hemos creído que las políticas educativas no pueden ser acertadas si no son receptivas a las inquietudes de cada una de las personas que integran la comunidad educativa. Por eso quisimos llegar a un acuerdo y, por eso, haberlo logrado tiene para nosotros tanta importancia. Porque nos va a permitir alcanzar nuestros objetivos partiendo del concierto de voluntades y avanzar en la consecución de ese reto que es la excelencia de nuestro modelo educativo, desde la base del acuerdo. Lo verdaderamente importante no es, desde mi punto de vista, si el Pacto supone haber conseguido en Murcia lo que no se ha conseguido en otras partes de España, sino el hecho de que toda la sociedad murciana sea copartícipe de un sueño que se ha tornado en un proyecto compartido: la calidad en la enseñanza en la Región.

¿Cuál es el secreto para lograr que todos los implicados en la Educación, incluso los de posturas completamente opuestas, se unan en una misma firma?
No creo que exista ninguna receta mágica para alcanzar un acuerdo de estas características. Nada más que la voluntad de mejorar, la disposición al diálogo y la generosidad por parte de todos para dejar a un lado posturas divergentes y lograr aunar voluntades. Somos conscientes de que la pluralidad de criterios es la artífice imprescindible para lograr lo que todos deseamos: mejorar la enseñanza y dotar a la Región del mejor sistema educativo posible. Esa es la mejor base desde la que podíamos partir.

¿Se puede trasladar la experiencia a lo que pretende el ministro Gabilondo de alcanzar un Pacto de Estado?
Entiendo que sí. Según se nos planteó en Conferencia Sectorial el pasado mes de diciembre, la intención del ministro es, al igual que la nuestra, propiciar un marco de diálogo que comprenda a todos los sectores sociales para diseñar el futuro de la Educación en nuestro país.

En todo caso nuestra experiencia apunta a un largo proceso de negociación que requiere de una voluntad decidida del Ministerio encargado de capitanearlo. Lo que sí le aseguro es que todos los sectores que integramos la comunidad educativa en España estamos dispuestos a llegar a acuerdos que permitan superar las carencias de las que adolece nuestro modelo educativo.

La carrera profesional, el refuerzo de la dirección, la evaluación, etcétera, son puntos que también aparecen en la LEC. Es decir, en las autonomías, digamos, preocupan o se trazan los mismos caminos. ¿Se puede trasladar eso a la negociación en Madrid?
Por supuesto que son cuestiones que deben tratarse en esa mesa de negociación. Pero no las únicas. El sistema educativo en nuestro país manifiesta importantes defectos. Es un sistema que no satisface a una gran mayoría de la sociedad española. Buena prueba de ello la tenemos en la triste judicialización a la que, por falta de diálogo, han conducido cuestiones como por ejemplo la polémica asignatura de Educación para la Ciudadanía o el curso puente de Bachillerato. Los últimos informes PISA dicen que estamos en el furgón de cola de toda Europa, que ha ido rebajando el nivel de conocimientos e imponiendo una laxitud en los niveles de exigencia. Hay que crear un sistema que garantice la vertebración del territorio español, la igualdad de oportunidades y la movilidad geográfica. Un sistema que sea la llave que les abra la puerta al mundo actual, potenciando la enseñanza de idiomas. Es necesario un sistema educativo que garantice, asimismo, la libertad de los padres a elegir el modelo educativo que quieren para sus hijos, y que se instauren valores como el esfuerzo, la responsabilidad y el respeto al docente. Queremos lograr, en definitiva, la calidad y la excelencia educativa como motor de una economía competitiva y productiva.

Murcia representó durante el segundo semestre de 2009 al resto de autonomías en el Consejo de Ministros de Educación de la UE.
Efectivamente, coordinamos la voz de todas las comunidades sobre los temas educativos que se trataron en el Consejo de Ministros europeo de noviembre. En concreto se nos plantearon cuestiones relacionadas con la inmigración, con las medidas adecuadas para garantizar su integración en las aulas, y para reducir las diferencias que existen en términos de resultados, entre los inmigrantes de segunda generación y los autóctonos. Ha sido una experiencia muy gratificante e ilusionante. Y exigente.

Murcia

Evaluación
“El Plan de Actuación de la Inspección para 2009-10 ya ha incorporado como prioridad la elaboración de un sistema de indicadores de calidad para la evaluación interna de los centros en búsqueda de buenas prácticas. Además, se ha constituido un equipo transversal de evaluación con inspectores, técnicos estadísticos, asesores docentes, etc. que están preparando la creación del nuevo Instituto de Evaluación”.

Bachillerato
“Hemos decidido que los alumnos del primer curso de Bachillerato de la Región con tres o cuatro asignaturas suspensas deberán repetir el curso completo. Si bien, de manera excepcional, los equipos docentes pueden determinar mantener la nota de las materias aprobadas, y la posibilidad de mejorar esas calificaciones”.

Pacto de Estado
“Yo creo que debe ser un gran pacto social y político que sea capaz, por un lado, de garantizar los principios inalterables de la Educación, y por otro, de implicar y considerar a las comunidades autónomas y a los agentes educativos”.

Mayoría y Pacto
“Una de las señas de identidad del Gobierno del PP en Murcia es su capacidad para diseñar políticas partiendo del diálogo y el consenso con la visión plural de quienes representan a los distintos sectores que integran la sociedad. La Educación no es una excepción”.

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