Una matriculación marcada más que nunca por la libertad de elección

La mayoría de consejerías se ha puesto ya manos a la obra en la prematriculación de alumnos en los centros. Un proceso que todos los años no se escapa de las polémicas producidas por las artimañas de muchos padres para ingresar a sus hijos en los colegios que ellos quieren. Y este año no podía ser menos, sobre todo tras conocer la noticia de los 3.071 padres sancionados en Murcia por falsear las solicitudes de admisión. El portavoz de Educación del PP en el Congreso, Juan Antonio Gómez Trinidad,lo tiene claro: “Esto se produce porque la libertad de elección no está garantizada, ya que si el padre pudiera elegir el centro que quiere para sus hijos, no se vería obligado a estas corruptelas”.

Precisamente, la matriculación de este año está coincidiendo con el debate sobre la incorporación de la libertad de elección de centros en el Pacto educativo al que quiere llegar el ministro. Y la gravedad de las irregularidades y las falsificaciones es vista por varias organizaciones como una gran oportunidad para que en el Pacto se tomen medidas. La patronal CECE, por ejemplo, ya ha pedido que “se reduzca lo máximo posible el valor de la proximidad al domicilio y del nivel de renta en los criterios de admisión de alumnos, y que los centros puedan fijar otros complementarios según su proyecto educativo y, en su caso, su ideario”.

Y es que la zonificación está en el punto de mira de varias organizaciones, sobre todo aquéllas con mayor presencia en la Concertada. La FERE ya ha solicitado en varias ocasiones que se doten de más peso a otros criterios, como la renta o el número de hermanos, antes que la zonificación, para que así los padres puedan elegir según sus creencias y convicciones. Javier Cebrián, presidente de Concapa Murcia, tiene la seguridad de que hechos como los que ocurren en su comunidad se producen “porque no existe una libertad abierta o clara para elegir centro o porque se imponen limitaciones a los padres”.

En Castilla y León, desde la Consejería presumen de que “en esta comunidad apenas se producen problemas porque la misma Administración propicia que el 95% de los alumnos termine estudiando en el centro de primera elección”. Este porcentaje se consigue gracias a un decreto de admisión en el que la primera elección se tiene muy en cuenta, aunque también hay que considerar que en Castilla y León no suele producirse masificación en los centros y las ratios se mantienen por debajo de lo que establece el Ministerio. “Sí que hay centros que tienen pocas vacantes, pero en cuanto se queda alguna libre, se avisa a los padres”, manifiestan desde la Consejería.

Otra comunidad que ahora se jacta de mantener un proceso de admisión limpio es Andalucía. Y lo hace “ahora” porque históricamente se lleva la palma en cuanto a falsificaciones de padres que llegaban incluso a divorciarse ante la mayor puntuación que se concede a los hijos de padres separados, o que llegaban también a contratar a detectives o abogados para denunciar a quienes se beneficiaban de tales prácticas para que sus hijos fueran admitidos .

Ahora, como señala Pilar Triguero, presidenta de la Codapa, “en Andalucía se hace bastante difícil cometer fraude, ya que la Administración comprueba vía telemática toda la documentación directamente desde la Agencia Tributaria en lo que se refiere a la renta, y desde los padrones municipales la que tiene que ver con el domicilio”.

En Extremadura, desde la Consejería también manifiestan que “desde que se pusieron en marcha el año pasado las oficinas de escolarización tampoco se han producido irregularidades”. Estas oficinas se crearon en aquellas localidades cuyo número de centros y la demanda de plazas lo hacía aconsejable, y su función consiste en acercar a las familias la información sobre el proceso de admisión y facilitar así los trámites.

Pocas novedades
Pero, a pesar de los mecanismos que se ponen en marcha para evitar las irregularidades, las consejerías no abordan la base del problema y apenas realizan cambios en las puntuaciones de algunos criterios que son los que impiden a los padres conseguir plaza para sus hijos en un determinado colegio, como es el caso de una zonificación estricta. En este sentido, la mayoría de comunidades sigue otorgando mayor puntuación a la proximidad del centro al domicilio, la existencia de hermanos o la cercanía al lugar del trabajo de los padres.

De hecho, en Aragón, como novedad para este curso, se ha puesto en marcha un sistema de geolocalización por el cual se otorga puntuación adicional a aquellos niños que viven a menos de 1.000 metros del centro escolar.

Cataluña, por su parte, ha decidido beneficiar a las familias monoparentales, equiparando su puntuación a la de las numerosas. Según fuentes del Departamento de Educación, “en caso de empate por criterios complementarios, las familias monoparentales que puedan acreditar esta condición a través del carnet correspondiente expedido por el Departamento de Acción Social y Ciudadanía, cuentan con 15 puntos más”.

Andalucía, por su parte, ha optado por “garantizar la agrupación familiar y la escolarización de todos los hermanos en el mismo centro”, de manera que va a incorporar con carácter prioritario la máxima puntuación para el alumno que ya cuente con hermanos en el centro”.

ALGUNOS DETALLES DE LOS CRITERIOS DE ADMISIÓN

• Criterios prioritarios

El Gabinete Técnico de FETE-UGT ha elaborado un estudio comparativo de las normas de admisión de alumnos por comunidades. En este informe se aprecia cómo Castilla-La Mancha, País Vasco y Murcia limitan los puntos máximos en cada criterio prioritario (hermanos matriculados en el centro, padres que trabajen en el centro, proximidad del domicilio, rentas y discapacidad).

• Criterios complementarios

Según el estudio de FETE, “en Asturias y Cantabria no se aplica ningún criterio complementario (familia numerosa, enfermedad crónica o criterio establecido por el centro)”.

• Padres en el centro

En cuanto al baremo por la existencia de padres o tutores legales que trabajen en el centro, la puntuación oscila entre el punto de Andalucía, Canarias y Extremadura, hasta los ocho de Asturias y Castilla-La Mancha.

• Enfermedades crónicas

En Aragón, Baleares, Cataluña y Madrid se conceden puntos complementarios cuando el alumno padece una enfermedad crónica del sistema digestivo, endocrino o metabólico. Este criterio figuraba como prioritario en la LOCE,pero no en la actual LOE porque en la práctica demostró que daba lugar a irregularidades.

• Puntos complementarios

Baleares, Canarias, Castilla y León, País Vasco, La Rioja, Madrid, Murcia, Navarra y la Comunidad Valenciana permiten que los propios centros establezcan puntos complementarios por circunstancias tales como ser hijo de antiguo alumno o por pertenecer a una familia monoparental.

• Familia numerosa

En la LOCE la condición legal de familia numerosa se consideraba un criterio prioritario en el proceso de admisión. En la LOE no se ha establecido este criterio, pero, sin embargo, en la mayoría de comunidades se ha incluido como complementario.