fbpx

CECE reformará sus estatutos y será “menos presidencialista”

Se trataba del primer congreso de CECE tras el cambio en la cúpula y había cierta expectación. Además, el Congreso se celebraba en Vigo, apenas mes y medio después del fallecimiento de forma repentina del presidente de CECE-Galicia y un histórico de la organización, José Manuel Álvarez Fernández. Dos razones que añadían al encuentro una especial intensidad, según nos explicaba alguno de los congresistas.
José Mª de MoyaMartes, 2 de noviembre de 2010
0

En cuanto a las cuestiones de régimen interno, se anunció un cambio en los estatutos de CECE en dos direcciones. De un lado, se pretende limitar las atribuciones del presidente. ¿Cómo? Mediante la presentación a las elecciones de listas abiertas, en lugar de candidaturas cerradas que luego dificultan la integración del adversario en el comité de dirección. “Se trata de adoptar un sistema menos presidencialista que el que teníamos”, según explicaron. La otra novedad estatutaria se refiere a abrir la organización a otros campos como el de las universidades o las escuelas de negocios. Ya se han integrado algunas, pero quieren más.

Por lo que toca al Congreso propiamente dicho, el conselleiro gallego, Jesús Vázquez, y la presidenta del Consejo Escolar del Estado, Carmen Maestro, se encargaron de la inauguración con sendos discursos antagónicos a los que nos tienen acostumbrados. Si Vázquez ponía el acento en los problemas que padece nuestra Educación, Maestro –sin negar éstos– se deleitaba enumerando los grandes logros de las últimas décadas como “la escolarización en Infantil, el aumento de la escolarización hasta los 19 años y el aumento de titulados universitarios”. Si Vázquez enumeraba los diversos frentes abiertos como “acabar con la conflictividad en las aulas”o “abordar la desmotivación del profesorado que tiene consecuencias directas sobre el alumnado”, Maestro aseguraba que “contamos con muy buenos centros, muy comprometidos y que hacen muy bien su labor y en sintonía con las familias”. Dos enfoques muy distintos de lo que es probablemente la misma realidad.

Antonio Rodríguez-Campra, presidente de CECE, se abonó al enfoque de Vázquez y puso el acento en las alarmantes cifras oficiales de fracaso escolar a las que se permitió añadir otros conceptos. “Si consideramos dentro de la cifra de fracaso la suma de los alumnos que suspenden, los que promocionan sin tener los conocimientos mínimos, los que abandonan prematuramente los estudios y los que, tras haber finalizado estudios superiores, no consiguen un puesto de trabajo acorde a su formación, nos encontramos con un porcentaje altísimo y la la CECE, en colaboración con todos, está dispuesta a trabajar para terminar con este problema”. Ese afán por colaborar con todos –leitmotiv de su candidatura y lema del Congreso– fue otra de las ideas-fuerza de Rodríguez-Campra.

Chispeante fue también la ya tradicional mesa redonda de los políticos. Representantes de las administraciones de Andalucía, Castilla-La Mancha y Cataluña de un lado y de Valencia, Murcia, La Rioja y Galicia del otro, respondieron a las inquietudes del medio millar de titulares de centros privados y concertados participantes. Dos dilemas levantaron la temperatura del coloquio: libertad versus planificación y decreto de derechos y deberes de los alumnos versus pedagogía.

0