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Bedera asegura que las diferencias son mínimas y son fruto del nivel sociocultural

La consejera madrileña, Lucía Figar, considera que “si fuera la variable definitiva, nosotros no estaríamos por encima de Alemania o Suecia, y España no tendría peores resultados que Polonia".
Adrián ArcosMartes, 14 de diciembre de 2010
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Si hay algo que evidencia el Informe PISA es la brecha educativa que sigue existiendo entre el norte peninsular y la zona sur y levante. De las 14 comunidades autónomas que han participado en esta muestra, las que mejores resultados han obtenido en comprensión lectora han sido Madrid, Cataluña, Castilla y León, Navarra, País Vasco y Aragón, que se sitúan por encima de algunos países de nuestro entorno. En el lado opuesto se encuentran Baleares, Canarias y Andalucía, y a gran distancia Ceuta y Melilla.

El Gobierno, como es habitual, continúa justificando estos resultados en las diferencias socioculturales. Durante la rueda de prensa en la que presentó el informe, el secretario de Estado de Educación, Mario Bedera, indicó que “este desajuste territorial es mínimo –menos de cuatro puntos–, y si le restamos el índice sociocultural, las diferencias son despreciables”. El secretario de Estado puso como ejemplo que “dos tercios de los padres del alumnado madrileño de esta edad tiene estudios medios o superiores, mientras que en el caso de los andaluces, sólo un tercio cuenta con esos niveles de formación y cualificación”.

Además, Bedera destacó que “las desigualdades no existen entre los centros, pero sí entre los alumnos de los propios centros, que roza el 70%”. En este sentido, el secretario de Estado indicó que estos factores “responden a la falta de autonomía de los centros escolares, así como a una deficiente implicación de las familias, de los alumnos o de los profesores”. Para Bedera “éstos sin los ítems que tenemos que tocar y a los que dirigir nuestras políticas”.

Desde Madrid, cuyos alumnos están a la cabeza de España en comprensión lectora y a la misma altura que los países de la OCDE que obtienen mejores resultados, la consejera Lucía Figar admite que “esa variable explica parte del éxito, pero no todo”. Según la titular de Educación, “si fuera la variable definitiva, nosotros no estaríamos por encima de Alemania o Suecia, y España no tendría peores resultados que Polonia. Importan más las políticas, el centro o el profesor”. Figar destacó estos buenos resultados “con un 17% de alumnado extranjero y con resultados equitativos, es decir, con menor diferencia entre los últimos y los primeros de la fila”. Por poner un ejemplo, si se compara Madrid con Andalucía, la diferencia alcanza los 42 puntos, lo que supone prácticamente un año académico, ya que según PISA, a partir de 39 puntos de diferencia se puede considerar un curso superior.

Principios socialistas
Para la consejera madrileña, “estos buenos resultados se deben a que en la Comunidad de Madrid estamos recobrando los valores del mérito, del esfuerzo, la exigencia y la autoridad del profesor, principios que las leyes socialistas han abandonado por completo. Y eso que somos una comunidad con una alta cuota de inmigrantes”. El mismo argumento presentó la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, que aseguró que los resultados de PISA la animan a “seguir erradicando de la Educación madrileña todos esos principios que las leyes socialistas han introducido”.

Esta no es la visión que tiene la consejera de Aragón, María Victoria Broto, que justifica los buenos datos obtenidos por su comunidad en que “ la LOE ha tenido claro que había que mejorar la competencia lectora en España”. Además, Broto señaló que “los resultados en compresión lectora de Aragón todavía no alcanzan la puntuación de las competencias matemática y científica porque los avances en Educación suelen ser lentos”.

Pero si hay una comunidad que destaca en los tres ámbitos analizados por PISA es Castilla y León, a pesar de la gran dispersión poblacional producida por el predominio del entorno rural. Sus resultados se encuentran al mismo nivel que los mejores países de la OCDE en lectura (el quinto puesto), está entre los siete primeros en Matemáticas, por encima de Francia y Alemania, y entre los cinco mejores en Ciencias, casi a la altura de Japón y Canadá.

El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, atribuyó estos datos a la “profesionalidad, dedicación y vocación del profesorado, así como a la colaboración de las familias y el esfuerzo de los propios alumnos en un sistema que pretende ser de exigencia y no de complacencia”. Según Herrera, “las estadísticas no son fruto de la casualidad, sino que consolidan una tendencia firme en la calidad”.

Relevo de La Rioja
De esta forma, Castilla y León ha destronado a La Rioja como la comunidad española con mejores resultados en las tres competencias evaluadas. En competencia lectora, los estudiantes riojanos han obtenido 498 puntos, seis más que en 2006. Sin embargo, en aquella ocasión se colocaron a la cabeza de España, mientras que esta vez se tienen que conformar con la segunda mejor nota después de Castilla y León y Madrid, con 503 puntos.

Sin embargo, es en competencia matemática donde La Rioja cae al quinto puesto con 504 puntos, dos menos que Aragón, seis menos que el País Vasco, siete menos que Navarra y diez menos que Castilla y León. Finalmente, los alumnos riojanos son segundos en competencia científica, junto con Navarra, con 509 puntos.

Para el consejero riojano, Luis Alegre, “la comunidad ha revalidado los buenos resultados de su sistema educativo”, por lo que destacó que “La Rioja tiene una salud notable en materia educativa, que es debido, en gran medida, al cuerpo de profesores que tenemos”. Alegre recordó que “La Rioja cuenta con un 17,14% de inmigración, frente al 10,13% de la media nacional”.

También la Educación catalana ha mejorado su puntuación en este último informe, lo que ha permitido al conseller en funciones, Ernest Maragall, a realizar de nuevo una defensa de la Ley de Educación de Cataluña (LEC). Para él, “los resultados son fruto de los esfuerzos llevados a cabo por parte del profesorado, y de las medidas de política educativa adoptadas durante su mandato, que han sido combatidas en numerosas ocasiones por parte de los sindicatos de profesores”. También vinculó los resultados a un “triunfo de la cultura de la evaluación, ya que permite a los centros conocer sus puntos fuertes y puntos débiles”.

Desde Galicia, el conselleiro Jesús Vázquez se mostró “contento, pero no satisfecho con los datos del informe PISA” a pesar de que la comunidad se encuentra por encima de la media nacional en comprensión lectora y también por encima de la media de la OCDE en matemáticas y ciencias. Vázquez abogó por “potenciar los planes lectores, la formación del profesorado y la excelencia de la Educación del alumnado, atendiendo al clima en las aulas”.

CANARIAS, BALEARES, ANDALUCÍA, Y SU VISIÓN "POSITIVA"

  • A pesar de los datos obtenidos, las comunidades con menor puntuación han intentado hacer una lectura no muy negativa de sus resultados. Para la directora general de Administración e Inspección Educativa de la Conselleria balear, Maria Gener, “hemos detectado que en el caso de comprensión lectora en textos continuos, Baleares está en la zona alta. En cambio, lo que son textos discontinuos como gráficos o mapas estamos por debajo. En general contamos con un 70% de nuestros alumnos con un nivel aceptable, similar al de países como Austria”. Precisamente, éste es el único país que desentona en la posición obtenida en comprensión lectora.
  • Desde Canarias, el Gobierno confía en que el programa de refuerzo educativo que se inició en el curso 2009-10 modifique los resultados en los próximos años. “El camino es el correcto”, según la consejera Milagros Luis Brito, que no tuvo reparo en destacar, a su juicio, “los buenos resultados registrados en ámbitos como la equidad del sistema, el nivel tecnológico, el buen clima escolar o la integración de la población inmigrante”. Esta interpreción “positiva” de los datos le ha generado duras críticas por parte de la oposición política y de la comunidad educativa en general, que lo han considerado como una “visión autocomplaciente” de unos datos pésimos.
  • Por su parte, el consejero andaluz, Francisco Álvarez de la Chica, explicó en el Parlamento autonómico que “los datos reflejan un avance del alumnado andaluz en lectura” (la competencia mejora en toda España por un error técnico en las pruebas de 2006). Especialmente duro con el consejero fue el diputado del PP Santiago Pérez, que le censuró que “los datos hayan provocado sonrojo e indignación”, aunque añadió que “a nadie le sorprende porque Andalucía lleva mucho años a la cola, y mientras tanto la postura es la de mirar hacia otro lado”. De la Chica anunció un conjunto de medidas que tendrán como objetivo mejorar las competencias básicas del alumnado andaluz.
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