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Los sindicatos ocupan los INSS en contra del retraso de la jubilación

Adrián ArcosMartes, 25 de enero de 2011
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Hace ya más de una semana que los delegados sindicales se vienen concentrando en las oficinas provinciales y comarcales del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) como protesta contra la pretensión del Gobierno de retrasar la edad de jubilación a los 67 años. Ayer se produjo también un encierro en el INSS de varias provincias, y el próximo viernes UGT y CCOO han convocado manifestaciones ante la sede del Servicio Público de Empleo Estatal (el antiguo INEM) en algunas capitales.

Los sindicatos están dispuestos a buscar alternativas y propuestas que no pasen por un recorte de los derechos de los trabajadores que ellos consideran “injustificado”. Pero han advertido al Gobierno que irán aumentando gradualmente las movilizaciones según evolucionen las negociaciones con la patronal y el propio Ejecutivo. De hecho, desde CCOO y UGT se han mostrado partidarios de incorporar al conjunto de fuerzas políticas y sociales del país al debate. El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha recordado al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que “la reforma de pensiones entraría en vigor en el año 2013”, por lo que no entiende de dónde vienen las prisas. También ha hecho hincapié en que “el alargamiento de la edad de jubilación a los 67 años recortaría las pensiones en un 20% o 25%”.

Ahorro de 20.000 millones
Desde el sindicato asturiano Suatea advierten que la reforma del sistema de pensiones se trata realmente de “una operación calculada para ahorrar 20.000 millones de euros (cuatro veces el total de los recortes a los funcionarios del pasado año) a costa de los pensionistas del futuro inmediato (menos pensionistas y con menos pensión)”.

Para Suatea “la reforma implica la obligación de trabajar más años para jubilarse con mucha menos pensión, e igualmente da lugar a una reducción drástica de las posibilidades de empleo educativo, en un colectivo envejecido y que debería ser una fuente importante de empleo”. El sindicato considera que “estas medidas no tienen justificación objetiva alguna, ya que el actual sistema es perfectamente viable desde el punto de vista demográfico y de financiación”. Suatea emplaza “a los bien pagados apologistas de la reforma a un debate público para que demuestren con datos que esto no es así”.

El sindicato asturiano advierte también que “el alargamiento de la vida laboral irá acompañado de peores condiciones salariales para los jóvenes, como consecuencia de la disminución de la posibilidad de trabajar, así como de condiciones laborales peores”.

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