Figar reconoce que alargar el Bachillerato es de una "enorme complejidad técnica"

Así lo ha asegurado durante su comparecencia ante el pleno de la Asamblea, donde ha señalado que la propuesta del Ministerio de Educación de alargar el Bachillerato hasta los 3 años es de "una enorme complejidad técnica", pero ha negado que esconda una voluntad de "concertación" de esta etapa educativa. Figar ha asegurado que los principales problemas educativos se concentran en la etapa de Secundaria, que actualmente está configurada de una manera "muy rígida" que "no da juego a los alumnos".

Para introducir más flexibilidad, ha defendido la necesidad de una reforma "en profundidad" de esta etapa, y ha confiado en que se consiga con el diálogo y el consenso con los agentes sociales. En este sentido, ha subrayado que más flexibilidad no implica segregación de los alumnos, y ha apuntado que lo que de verdad segrega es el fracaso escolar, que en España es del 30%.

La consejera ha negado que el Ministerio quiera suprimir las becas en función de la renta de los receptores, y ha defendido que existan también becas para premiar la "excelencia", el mérito académico, éstas sí sin tener en cuenta criterios económicos para su concesión. Figar también ha remarcado la necesidad de mejorar el sistema de elección del profesorado, puesto que la calidad del sistema depende de la calidad de los docentes. "Hay que preguntar a los profesores si saben matemáticas o si saben la didáctica de las matemáticas; o si saben inglés, o cómo enseñar el ingles, que es muy distinto", ha afirmado.

Respecto a la polémica por el cambio de temario de las oposiciones de los docentes en varias comunidades, Figar ha emplazado a pedir explicaciones al anterior ministro de Educación del PSOE, puesto que dos días antes de las elecciones generales, el 18 de noviembre, se cambiaron los temarios, y el Gobierno del PP se ha limitado a restablecer los textos que estaban estudiando la mayoría de los opositores. También ha defendido la supresión de la asignatura Educación para la Ciudadanía, que "contenía elementos de adoctrinamiento", y ha apostado por ocupar esas horas en materias como matemáticas o lengua.

El diputado socialista Eusebio González Jabonero ha criticado tanto la supresión de esta asignatura –que "molesta porque educa en valores cívicos y habla de la separación de Iglesia y Estado, y eso no les gusta"– como el cambio de los temarios de los opositores, que supone "cambiar las reglas de juego cuando llevan cuatro meses estudiando". González Jabonero también ha criticado la ampliación del Bachillerato y la FP de Grado Medio, ya que, según ha dicho, supone "retomar la vieja máxima de segregar a los estudiantes a través de los itinerarios", obligando a elegir entre la FP y la Universidad a los 15 años. Según ha afirmado, al PP le parece muy prematuro que con 15 años puedan decidir si quieren interrumpir voluntariamente un embarazo, pero sí les obligan a elegir su futuro educativo a esa edad, una "incongruencia". La consejera ha respondido que a los 15 años los jóvenes tienen madurez para elegir cómo quieren continuar su formación, y ha recordado que en Alemania escogen sus itinerarios educativos a los 10 años.

Por su parte, la diputada de IU Eulalia Vaquero ha asegurado que el principal problema del sistema educativo es la falta de financiación, los recortes y la carencia de docente suficientes, y ha apuntado que la Comunidad de Madrid es "el epicentro de la desmantelación de la Educación pública". Figar, en respuesta a Vaquero, ha asegurado que está "archidemostrado" que los problemas educativos no se resuelven con más financiación, puesto que España es uno de los primeros países con más gasto por alumno, y ha vuelto a insistir en que lo que de verdad hace falta es una reforma de la Educación Secundaria para acabar con el fracaso escolar, que está detrás del alto porcentaje de paro juvenil.