Bedera augura “un otoño calentito” por la subida de las tasas universitarias

“Si hay algo peligroso para un ministro de Educación es entrometerse en el tema de las tasas universitarias, porque son una bomba incendiaria”. Así lo advertía la semana pasada el portavoz de Educación del PSOE en el Congreso, Mario Bedera, durante la presentación de las enmiendas socialistas a los Presupuestos educativos. “En octubre, cuando los alumnos vayan a hacer su matrícula y sus padres tengan que pagarla un 50% más cara, llegando incluso a los 2.000 euros, vamos a ver qué ocurre”, manifestaba Bedera. A su juicio, “la bomba es la suma del incremento de las tasas y la bajada de las becas”, por lo que auguró “un otoño calentito en Educación”.

El Grupo Socialista presentó un total de 54 enmiendas a los Presupuestos educativos por un valor de 550 millones de euros, de los que 180, la mayor partida, iban destinados a becas y ayudas al estudio. Las cantidades más importantes eran los 70 millones para libros de texto, 45 millones para matrículas gratuitas, 26 para Erasmus, otros 26 para el aprendizaje de lenguas y algunas otras correspondientes a la movilidad de profesores.

El segundo gran monto iba dirigido al capítulo de universidades con una cantidad global de 140 millones a través de los cuales se pretendía recuperar los campus de excelencia internacionales y los centros de excelencia, además de otras partidas para la transferencia del conocimiento. Bedera lamentó que “se hayan adelgazado de tal manera estas partidas que los objetivos que se piden a nuestro sistema universitario difícilmente se van a poder cumplir”.

El PSOE también quería conceder 100 millones para Educación Infantil de 0 a 3 años, ya que, según Bedera, “es una vacuna contra el fracaso y el abandono posterior como reflejan todos los informes internacionales” y se mostró sorprendido de que “el impulso de esta etapa apareciera en el programa electoral del PP, pero luego no lo hayan demostrado en los presupuestos”.

Igualmente, el PSOE propuso 54,5 millones de euros para Escuela 2.0, “no para ordenadores”, aclaró Bedera, “sino para la transformación de las aulas y para la formación del profesorado”.

También propusieron partidas por valor de 45 millones para la FP, 21,5 para los contratos-programa con los centros, 12 referidos a lectura y bibliotecas, y dos enmiendas para la promoción del asociacionismo “que se ha eliminado casi completamente”, según el portavoz del PSOE. Concretamente 600.000 euros para las AMPA y dos millones para las asociaciones de estudiantes.

Partidas que “sobran”
Para Bedera, también hay dos partidas de los presupuestos del PP que suben, pero que a su juicio “sobran”. Por un lado, 120.000 euros destinados a la escuela concertada y que el PSOE quería dedicarlos a completar el plan de reducción del abandono, y la partida de 193.000 euros para el Diccionario Biográfico Español de la Academia de la Historia, que los socialistas pretendían usarla para el programa de cobertura de libros de texto.

Sin embargo, el Gobierno no aceptó ninguna de las enmiendas que propuso el PSOE. La portavoz de Educación del PP, Sandra Moneo, subrayó que “estas cuentas se enmarcan en la absoluta excepcionalidad” y que “en Educación es tan importante invertir como hacerlo bien”, algo que en su opinión “no se ha hecho”. De hecho, criticó que “las enmiendas del PSOE exceden en un 800% el crédito total del Ministerio de 2012”.