UGT denuncia a Aguirre y Figar por contratar 28 profesores nativos de inglés
La denuncia ha sido presentada por la FETE-UGT de Madrid para criticar la contratación "al margen de las vías ordinarias" de estos profesores extranjeros, la mayoría de los cuales imparten clases de Educación Gísica en la red de centros públicos de enseñanza bilingüe de la Comunidad. Eduardo Sabina, secretario general de FETE-UGT de Madrid, ha explicado a Efe que estos profesores nativos "cobran unos 5.000 euros menos" al año que el resto del personal docente de la Comunidad de Madrid de su misma categoría, a pesar de que "trabajan cuatro o cinco horas más a la semana". Ha afirmado que estos profesores nativos representan "mano de obra barata" para la Consejería de Educación y además "no generan problemas" ya que su situación laboral (están contratados durante un año) hace que no tengan consolidado su puesto de trabajo.
Según a explicado Sabina, estos profesores nativos tienen problemas para expresarse en castellano con los padres de los alumnos en caso de tener que hacerlo y además ha asegurado que existen docentes españoles cualificados para impartir las clases de Educación Física, Música o Plástica que ahora dan ellos. Asimismo, FETE-UGT ha denunciado que la Consejería de Educación convocó esas 28 plazas en una página web, donde sólo se requería hablar inglés como primera lengua para impartir a los alumnos de los centros públicos bilingües enseñanzas curriculares. Para Eduardo Sabina, la Comunidad de Madrid debería haber realizado estas contrataciones de acuerdo con el procedimiento reglamentario para la incorporación de personal interino y siguiendo los criterios de "igualdad, mérito y capacitación que deben regir en cualquier proceso de contratación ordinaria por la Administración pública".
Por su parte, el Gobierno regional va a dar "cobertura legal" a la contratación de profesores nativos en los colegios públicos bilingües de la Comunidad, para "equiparse" a otras autonomías "que tienen esta previsión contenida en rango de ley". Así lo ha anunciado el presidente de la Comunidad, Ignacio González, después de inaugurar la sede de Imdea en Getafe junto la consejera de Educación Lucía Figar, que, junto a la expresidenta madrileña, Esperanza Aguirre, ha sido denunciada por UGT por prevaricación al haber contratado 28 profesores de inglés nativos "al margen de las vías ordinarias".
Según ha explicado Figar, en la Ley de Medidas Fiscales y Administrativas para 2013 se va a dar "cobertura legal a la contratación de profesores nativos" en la Comunidad "al igual que han hecho otras comunidades autónomas como Andalucía", donde ha recordado que ni UGT ni ningún otro sindicato "se han quejado ni protestado de nada" y solo lo han hecho en Madrid. Figar ha acusado a los sindicatos de querer "tirar piedras contra el bilingüismo, contra la escuela pública y contra las familias que ven en esto una igualdad de oportunidades" para que sus hijos se formen en español e inglés.
Por su parte, ha asegurado tajantemente que la Comunidad de Madrid va a "seguir adelante" con la enseñanza pública bilingüe porque es "prioritaria" para el Gobierno regional, que el próximo año dedicará un 29% más de presupuesto a este programa. Figar ha dicho que es "una vergüenza" la actitud del sindicato UGT, que está "trabajando para lo contrario: para cargarse el programa de bilingüismo".
Por su parte, el presidente regional ha manifestado que la Comunidad ya tiene "cobertura legal suficiente para hacer lo que está haciendo" y ahora lo que pretende es "reforzar la ley, la posibilidad" que tiene la Administración madrileña de contratar profesores extranjeros y equipararse "a otras comunidades autónomas que tienen esa previsión contenida en rango de ley". Para Ignacio González resulta "increíble" y "lamentable" que los sindicatos "actúen en contra y traten de impedir" un programa cuyo objetivo es "dar mejor formación en lengua inglesa a los estudiantes madrileños" y que acudan a los Tribunales de Justicia a denunciar la contratación de profesorado extranjero en lugar de apoyar el bilingüismo.