Los alumnos que no siguen la ESO, los más involucrados en actos de violencia
Este estudio, elaborado por psicólogas de las Universidades de La Rioja y Complutense de Madrid, también señala que existe una elevada correlación entre los contextos de escuela y ocio y determina tres perfiles de riesgo claramente diferenciados entre los alumnos. El trabajo, titulado "Perfiles de riesgo y violencia entre iguales en el contexto escolar y tiempo libre", se realizó sobre una muestra de 1.622 alumnos, de entre 14 y 18 años, de centros educativos escogidos aleatoriamente de la Comunidad de Madrid, ha detallado la Universidad de La Rioja (UR) en una nota.
Los alumnos respondieron al Cuestionario para la Evaluación de la Violencia en la Escuela y en el Ocio (Ceveo), en el que se exponían 15 situaciones relacionadas con la violencia entre iguales desde las perspectivas del agresor, de la víctima y del observador. Los resultados indicaron que los alumnos más expuestos a la violencia en la escuela también lo estaban en los momentos de ocio o tiempo libre.
También se analizaron las características de aquellos alumnos que participaban en mayor o menor medida en situaciones de violencia y se obtuvieron tres perfiles de riesgo diferenciados. La mayoría de los alumnos, 1.126, pertenecía al perfil de mínima exposición a la violencia, aquellos que no habían participado ni como víctima ni como agresor en las situaciones elevadas. El 25 por ciento del total de alumnos, 413, afirmaba que protagonizaba frecuentemente casos de exclusión o violencia psicológica y el 5 por ciento, 83, estaba en el grupo de alto riesgo, formado por el que decía participar con elevada frecuencia en situaciones de violencia, dentro y fuera del contexto escolar, llegando a ejercer y/o sufrir amenazas graves y agresiones físicas.
El estudio, según la UR, es pionero al incluir en el análisis grupos de los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI), plan alternativo para alumnos que no han superado la ESO. La mayor parte de los adolescentes del perfil de alto riesgo pertenecía a estos niveles formativos, por lo que las investigadoras concluyen que la trayectoria educativa es una variable relevante en el análisis de la violencia escolar.