El Gobierno canario rechaza el "efecto llamada" de las oposiciones enseñanza
El vicepresidente y consejero de Educación, Universidades y Sostenibilidad, José Miguel Pérez, ha reiterado a los periodistas que la intención del Ejecutivo canario es convocar las oposiciones en enseñanza, en este caso en el cuerpo de inspectores y en la plantilla de maestros de Primaria, en especial de idiomas. Pérez ha explicado que la Consejería de Educación negocia este tema con los sindicatos –"ya se han producido tres reuniones sectoriales"– y que rechaza el argumento del efecto llamada –que opositen profesores del resto de España– porque "se van a convocar muchas más plazas que las que oferta Canarias, lo más probable en las mismas fechas y, más de la mitad, en las mismas especialidades".
El consejero se ha mostrado partidario de convocar las oposiciones porque da "estabilidad" a las plantillas del profesorado y ha agregado que esta es "la única forma legal de hacerlo". Si fuera por Pérez, Canarias convocaría oposiciones a tantas plazas como trabajadores interinos tiene, pero que eso lo prohíbe la normativa estatal: "Solo se podía establecer el número de plazas en base al 10% del número de jubilados del curso anterior, aunque ahora se permite algo más si se acumulan con otras consejerías y áreas, como Justicia y Sanidad". "No solo se trata de fijar y estabilizar las plantillas del profesorado, sino que se ha planteado también a los sindicatos la reforma de algunos aspectos de las listas de empleo que estén en la mano del Gobierno de Canarias", ha destacado Pérez.
El consejero ha informado de que con la normativa anterior era "muy complicado convocar" oposiciones, sobre todo después del varapalo recibido cuando lo intentó el Gobierno de Canarias en el curso anterior. Pérez ha señalado que esa normativa ha sido alterada por el Ministerio de Educación y que, a partir de ahí, Canarias ha reconsiderado su posición y que, en vez de convocar las 50 plazas que tenía previstas en un principio, ahora dispone de 138 ó 139.