Los nuevos centros se construirán con financiación público-privada en Canarias

Canarias ha puesto en marcha un proyecto que persigue dotar al archipiélago de la infraestructura educativa necesaria a través de un modelo de financiación público-privada, dinamizando así a un sector que está en crisis y a la vez creando empleo. El consejero de Educación, José Miguel Pérez, aseguró que “esta nueva modalidad en la construcción de centros no tiene precedentes en otra comunidad autónoma”. Pérez explicó que esta modalidad contempla que las empresas sufraguen el coste de la construcción y gestionen los servicios complementarios. “Los servicios educativos, lógicamente, serán siendo públicos”, afirmó el consejero quien, además, aclaró que “la gestión privada de servicios como el comedor, la cafetería o la seguridad, no supondrá ningún coste para las familias”.

Según la vicepresidenta de la Federación Provincial de Entidades de Construcción (Fepeco), Ángeles Palmero, coincidió con el consejero en este aspecto. Según Palmero, “la construcción tiene un paro estructural y el sector público y el privado tenemos que buscar soluciones”. Para Palmero, “la solución puede estar aquí, ya que tenemos un objetivo común: poner en actividad al sector de la construcción, que es un sector ‘arrastre”.

De esta forma, el Ejecutivo autonómico financiará la construcción de los nuevos centros con cargo a la iniciativa privada, con un proyecto de colaboración público-privada “que en estos momentos difíciles económicamente y ante el paupérrimo marco financiero que nos ha dejado el Gobierno central, es una oportunidad muy interesante, ya que nos permitirá construir los centros que se necesitan, contribuyendo a la mejora de la calidad educativa, la creación de empleo y el crecimiento económico en las Islas, sin afectar al endeudamiento público, ni elevar el déficit de la comunidad. La inversión inicial es de 80 millones de euros para un total de 15 centros educativos, “una inversión muy relevante”, según el consejero.

Creación de empleo
Según la Consejería, la puesta en marcha de este proyecto permitirá crear en Canarias 900 puestos de trabajo directos y otros 1.200 indirectos. Tal y como afirmó Pérez, “no se trata solo de los centenares de puestos de trabajo que se generarán en la construcción, sino aquellos que vendrán cuando se cubran las plazas de los servicios complementarios”.

La Consejería tiene previsto convocar el concurso de adjudicación de obra antes del verano. Para ello ha sacado ya a información pública los proyectos y el estudio de viabilidad económico. Los plazos de construcción son de 12 meses para centros de nueve y 10 unidades y de 18 meses para los de 22 y 33. Las empresas adjudicatarias serán responsables de la construcción, equipamiento y mantenimiento durante 27 años y se ocuparán también de los servicios de comedor y cafetería, la limpieza y el servicio de conserjería. La Consejería, por su parte, se hará cargo de los docentes, la dirección del centro y la Inspección del cumplimiento de las condiciones señaladas en el pliego del concurso por parte de la adjudicataria. Pasados los 27 años, los centros serán devueltos a la Administración autonómica.