“Hay que evitar que la religión sea un obstáculo para el diálogo”

Naouel Abdellatif es la coordinadora del proyecto internacional de investigación y cooperación universitaria Abdem, que utiliza un enfoque basado en derechos humanos para aplicarlo a la Educación Superior de los países del Magreb. Naouel Abdellatif también es vicerrectora de Relaciones Exteriores, Cooperación, Animación, Comunicación y Eventos Científicos de la Universidad de Sétif 2, en Argelia, así como profesora de esta universidad. El proyecto Abdem está financiado por la Comisión Europea, a través del programa Tempus, con un millón de euros.

Una primera cuestión, ¿cómo resolver los problemas genéricos que hay en la interpretación de los derechos humanos?
Cuando se habla de derechos humanos no deben existir conflictos porque deben ser valores universales. Puede haber visiones un poco diferentes de este tema y, por eso, lo que intentamos en este proyecto es aplicar esos derechos humanos que son universales, pero viendo el contexto en el que estos se aplican y adaptándolos al contexto en el que se van a aplicar.

Por ejemplo, vamos a tratar cuestiones que son conflictivas en la aplicación de estos conceptos en nuestro país.
¿Por ejemplo?

El uso del velo islámico en los colegios, ¿cuál es su posición sobre este tema?
Hay que eliminar los estereotipos en el ámbito de los derechos humanos. Intentar comprender las personas sin hacer interpretaciones personales. Comprender a las gente como es, los motivos y la finalidad de sus actuaciones y los valores. A partir de ahí se puede construir. Creo también que no se puede generalizar, hay cosas que nosotros vemos contrarias a los Derechos Humanos, pero la excepción no hace la regla. Cuando hacemos el esfuerzo de entender a los demás, cuando estamos en disposición de conocer y saber, estamos en disposición de eliminar los estereotipos y se trabaja la tolerancia y la comprensión del otro.

¿Cuál es la línea roja que no podemos cruzar?
Que los límites de mis derechos comienzan donde empiezan los derechos del otro.

¿Legislaría en contra del uso del velo islámico en las escuelas?
No soy política, por eso no puedo contestarle. Yo investigo y doy resultados para que la política pueda tomar decisiones, pero la política debe basarse en esas investigaciones para ver cuáles son los mejores modos de actuar en cada una de las sociedades en las que estamos. Como persona que cree en los derechos humanos no podría hacer algo que va contra lo que pienso, que es lo esencial dentro de este ámbito. Es decir, no estoy de acuerdo con todo aquello que va en contra de los derechos humanos.

¿Consideras que el velo islámico pone en cuestión o en peligro la seguridad?
La cuestión de decir si es un peligro o no es subjetiva. ¿Qué es lo que tú interpretas como un peligro? Para poder examinar este asunto primero tienes que saber por qué esa persona reivindica una manera de vestir, por qué la quiere y cuáles son las condiciones. En ese momento puedes empezar a dialogar para ver los límites. Antes de tomar decisiones hay que entenderse.

¿Cómo está legislada la libertad religiosa en las escuelas de los países del Magreb? ¿Es usted partidaria de esa legislación?
No puedo hablar de Marruecos y Túnez porque no los conozco. En cuanto a Argelia, he hecho un proyecto con el Consejo de Europa sobre la diversidad religiosa durante dos años de trabajos. La respuesta está basada en resultados concretos de investigación académica que va a ser publicada pronto. En Argelia, según este estudio, se ha avanzado bastante en la libertad religiosa y en la diversidad religiosa dentro del país y en este momento cualquier persona que tenga una religión monoteísta y no monoteísta puede ejercerla libremente. En los colegios la situación es diferente respecto a Europa porque no hay emigrantes que vengan de otros países, por eso es la Educación islámica la que se enseña actualmente. Si hay poblaciones extranjeras con otras religiones, Argelia estaría totalmente abierta a darles la posibilidad de enseñar religión de ese tipo como ya ha hecho con otras formaciones. En ese sentido, el gobierno está dispuesto a dar su apoyo.

Actualmente no hay masa crítica pero, ¿si hubiera una familia que estuviera en un colegio y no quisiera recibir religión porque son católicos, por ejemplo, podrían no recibir religión?
Si una persona no quiere recibir esa formación no lo hará. Tenemos casos donde los estudiantes no conocen el árabe y reciben la formación en otra lengua.

Ese es otro prejuicio que hay en España porque cuando un estudiante árabe demanda la enseñanza se alude a que en sus países no se hace lo mismo.
Ahí reside la importancia de ir hacia el otro, de comprenderlo y así podremos ir hacia delante y avanzar dejando atrás los estereotipos.

No sé si comparte el planteamiento de que en un país como España se trate desde la opinión pública de tomar una visión laica de los derechos humanos y rechazar una visión más inspirada en una visión trascendente del hombre, lo que nos uniría más a otras culturas.
A veces, puede ser fácil hablar con una persona que no es creyente. Lo que hay que evitar es que las religiones sean un obstáculo al diálogo. Es algo que pertenece a tu identidad y tu personalidad, sin ser un obstáculo con el diálogo con las otras personas.