fbpx

La sugestiva “Educación en el asombro” de L’Ecuyer

Jueves, 24 de julio de 2014
0

El periódico Padres y Colegios publica en su último número del curso una entrevista deliciosa a Catherine L’Ecuyer, un soplo de aire fresco antes de irnos de vacaciones. Su libro Educar en el asombro (Plataforma) se ha convertido en un bestseller educativo de los últimos años, así como su popular blog apegoasombro.blogspot.com.es. Cada año pronuncia más de 40 conferencias en colegios para decir esencialmente que “el asombro es el motor del aprendizaje”.

Según L’Ecuyer, “llevamos años pensando que cuantos más estímulos, mejor. Pero en realidad la neurociencia nos dice que es lo contrario” y cita al neurobiólogo y psiquiatra Dan Siegel, que considera que no hay necesidad de bombardear a los niños con una estimulación sensorial excesiva con la esperanza de construir mejores cerebros. Más aún, diversos estudios empiezan a relacionar el exceso de estímulos con problemas de aprendizaje. En este punto es donde L’Ecuyer lanza su órdago a esta generación multipantalla, tan necesitada de motivación para todo, que estamos alimentando los adultos. “Mi hipótesis –dice– es que si un niño está rodeado de estímulos que no se ajustan a sus ritmos y a su orden interior, entonces pierde ese asombro y pasa de aprender desde dentro hacia fuera, a esperar a que le entretengan desde fuera hacia dentro”. Provocador, ¿verdad?

Ahora lo que se lleva es que hay que motivar al nativo digital como sea porque, si no, se distrae o se aburre. Con apps educativas, pizarras digitales o tabletas, ejercicios on line, entornos personales de aprendizaje… Los educadores, dice L’Ecuyer, nos hemos convertido en “animadores de ludoteca”. Se dice que esta generación de la distracción no logra mantener la atención más de 17 minutos (recomiendo reportaje “Pensamiento 2.0. Educar en la época de la distracción”, también en Padres y Colegios) y que, por tanto, no conviene suministrarles píldoras de conocimiento que excedan ese tiempo. ¿Qué haremos si dentro de una década la investigación revela que los jóvenes ya no son capaces de mantener la atención más de cinco minutos? ¿Dónde está la pared? ¿Qué clase de personas queremos formar? ¿Queremos ir por detrás o por delante?

Felices vacaciones.

0