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“El país no está maduro para una revolución profunda”

Gonzalo Capellán, exconsejero de La Rioja tras su dimisión el pasado lunes, cree que el revuelo en torno a la Lomce no responde a la realidad, ya que se trata de una reforma flexible.
José Mª de MoyaMartes, 18 de noviembre de 2014
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El consejero de La Rioja considera que la reforma del PP no representa ninguna revolución para el sistema educativo. Además cree que España no está madura ni siquiera para debatir sobre esa revolución profunda, dado el revuelo que se ha creado con la Lomce. Gonzalo Capellán es partidario de plantear esa revolución al menos en el plano teórico, dado que sería imposible de llevar a cabo.

Éste ha sido un arranque de curso marcado por la implantación de la Lomce, que ha sido una ley controvertida, y también es un año electoral ya que hay elecciones autonómicas. ¿Se siente cómodo aplicando la Lomce?
Tan cómodo que La Rioja ha sido la primera comunidad que ha aprobado el currículum de Primaria de manera rápida y clara. No-sotros hemos detectado ámbitos donde existe una oportunidad para seguir mejorando, por eso ha sido una aplicación absolutamente natural.

¿Y respecto a la controversia en torno a la Lomce?
Claro que ha sido controvertida, pero yo creo que al final lo que ha demostrado es que aquí había mucho pastorcillo mentiroso y poco lobo porque parecía que de repente era un cambio radical del sistema, que no es así. La Rioja lo que ha hecho es potenciar Música e Inglés, dos lenguajes universales muy importantes en la formación elemental e implantar siete horas y media de razonamiento matemático y de comprensión lectora, que son dos ámbitos competenciales que sirven para prevenir fracasos posteriores.

¿No se han aumentado materias a costa de la Religión, como ha hecho el propio Ministerio?
En nuestro caso se ha mantenido todo el currículum, reforzando Inglés y Música, ya que creemos que no hay una Educación emocional adecuada a lo que tenía que ser el currículum del siglo XXI. Dentro de la Educación Artística hemos decidido que prevalezca la Música porque creemos que tiene muchos beneficios, demostrados científicamente, en el aprendizaje, en la motivación y en la Educación de la sensibilidad emocional. Es una apuesta que creemos que mejora el currículum. Además, se ha hecho con tiempo y ha habido gran consenso en la comunidad educativa en La Rioja.

¿Cómo valora la decisión que tomó el Ministerio de reducir la asignatura de Religión en su territorio?
Cualquier responsable debe ver, en su ámbito competencial, qué sistema educativo tiene, dónde hay debilidades, dónde hay oportunidades de mejora y tocar estrictamente lo que necesite o aprovechar la ley como una oportunidad. A partir de ahí yo no me he preocupado de los debates nacionales, de si quitan la Lengua o la Religión, etc. Yo me preocupo de los alumnos de La Rioja, que es con los que tengo el compromiso, y con sus familias.

Algunas voces echan en falta una reforma de todo lo que afecta al profesorado, el Estatuto docente. ¿El Partido Popular quería una reforma más en profundidad?
Creo que no hace falta una reforma sino una revolución en profundidad del sistema educativo, porque tiene unas carencias muy graves. Eso es lo que yo puedo pensar desde el punto de vista teórico.

¿La Lomce es esa revolución?
La Lomce no es esa revolución, pero si con una reforma que simplemente es flexible y que permite aplicaciones distintas por comunidades y que cada uno mejore su sistema educativo, se monta en este país la que se monta, imagínate lo que sería. Este país no es tan maduro para hacer un debate sobre la revolución profunda del sistema educativo.

¿Y sobre el Estatuto?
El tema del Estatuto está en la agenda y en el proyecto político del Partido Popular. Otra cuestión es que yo creo que no era la Lomce donde había que ocuparse del profesorado. Ni en los medios de comunicación, ni en la oposición he leído una sola crítica en profundidad del sistema. Solo se ha ido a aspectos irrelevantes.

¿Te parece que la Lomce se queda a mitad de camino? ¿Se podría haber llegado más lejos si las circunstancias lo hubieran permitido?
Cuando tienes que lidiar con un sistema tan complejo como el de Educación, donde todo el mundo opina y donde hay tantas instituciones y organizaciones con intereses particulares y con partidos con los que hay que negociar sobre ideologías, es imposible llevarla a cabo. Si no puedes llevar a cabo una reforma, ¿cómo vas a llevar a cabo una revolución? Pero esto no quiere decir que no tengamos que hacer una reflexión teórica para identificar qué necesita el sistema, para que sea el mejor posible.

En lo que podríamos llamar esa revolución pendiente, ¿se encuentra también el dotar de autonomía a los centros públicos para que los equipos directivos pudieran elegir a su Claustro?
Pero el problema de todo esto es que no creo que sean variables independientes, sino que están conectadas. Por ejemplo, si un centro quiere caminar en la senda del bilingüismo, tiene que haber autonomía no sólo para seleccionar.

¿Habría que vincular de alguna manera la retribución a la productividad?
Yo creo que hay que ser coherentes. Si queremos tener los resultados de un sistema que internacionalmente tiene prestigio y reconocimiento, o transformamos todo en profundidad y apostamos de verdad por ello y somos consecuentes o no llegamos a nada. Lo que no se puede es coger lo que me gusta y pensar que eso está desconectado de un sistema que exige, que evalúa o que premia.

¿Nuestro sistema está poco orientado a los resultados, a los usuarios del servicio, y más orientado quizá a mantener un statu quo?
Es cierto que a veces se olvida para lo que sirve el sistema. Si sirve para dar mejor formación para la vida y para formar personas, eso se olvida en demasiadas ocasiones. Los medios solo sirven para un fin: mejorar la Educación y dotar de poder a las personas para que tengan éxito en la vida. Si se olvida esa meta, el sistema educativo no vale para nada.

¿Le parece que a las facultades de Educación les falta conocimiento?
Yo no me atrevo a emitir un juicio sobre las facultades porque hay mucha línea de investigación y mucha gente que está en la vanguardia. Lo que debería hacerse es sentarse a hablar a nivel nacional con todo el sistema de qué formación óptima necesita el profesor o el maestro del siglo XXI y, según eso, diseñar el currículum más actualizado y mejor adecuado.

Pero la Consejería de Educación de La Rioja está por el cambio y la revolución, ¿no?
Sí, pero yo no tengo competencias para sentarme con las facultades, pero veo que hay que hacerlo porque, si no empezamos por ahí, no sabremos si la formación es óptima y adecuada. Hay que abrir el debate.

Yo no sé si tiene la sensación de que estos dos frentes, el de la formación inicial y lo que tiene que ver con el profesorado en sus aulas, chocan con los rectores y las universidades, por un lado, y con las organizaciones sindicales por otro.
Yo creo que al final, o somos coherentes y nos sentamos con todas las consecuencias o, si no, olvidémonos. Un mecanismo de cambio tan profundo exige dejarse muchas cosas en el camino.

La política tiene a veces más presentes los intereses particulares que el interés general de las familias, que nos merecemos tener buenos profesores para nuestros hijos…
A veces me he sentado con organizaciones sindicales que, cuando me han dicho yo represento a “x” profesores, yo les he dicho que represento a toda la sociedad riojana. Si alguien piensa que el político pierde el interés general, o no es político o hay que cambiar este país entero.

¿La Lomce está suficientemente financiada?
Creo que la Lomce sí que está financiada. En mi comunidad autónoma creo que viene bien financiada. Traer Fondo Social Europeo y convencernos de que en el empleo juvenil la mejor política viene desde la Educación, me parece un logro de este Gobierno. Yo ahora tengo nueve millones de euros más en cuatro años para implantar la Lomce en La Rioja. Creo que si lo hacemos bien y el dinero depende del resultado, está bien invertido y si encima vamos a poder aumentar profesores, pues bienvenido sea. Y luego, dentro de dos años, veremos cuántos alumnos de la FP Básica han podido terminar un ciclo exigente que les titula. A partir de ahí veremos si la inversión ha sido efectiva.

En concreto, ¿cuántos profesores en La Rioja y cuántos nuevos se han tenido que incorporar ahora para la FP Básica?
Entre este curso y el que viene, en un sistema pequeño que tiene 4.800 profesores en la red pública ahora mismo, se han incorporado 40 profesores nuevos en los dos cursos financiados por la llegada de la FP Básica. Sería un crecimiento que no hubiéramos podido hacer.

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