Mas: “Se está intentando alterar el consenso en una materia sensible”
Durante la presentación de la Memoria de la Comisión Jurídica Asesora, Mas ha criticado que “cuando se intenta alterar el consenso social en una materia sensible para cualquier país y cultura, las actuaciones no son justas, ni honestes ni útiles”.
Estas declaraciones llegan después de que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) reconociese el derecho de los alumnos a recibir un 25% de las clases en castellano, incluida una asignatura troncal.
Según el president de la Generalitat, las actuaciones del Estado respecto a Cataluña no son “justas, ni honestas, ni útiles”, puesto que el sistema educativo catalán es algo que “ha hecho suyo todo el pueblo de Cataluña, independientemente de su origen”.
En este sentido, Mas apuntaba que “el último año han pasado muchas situaciones dolorosas”, recordando la suspensión de la ley de consultas no refrendarias y del decreto firmado por él mismo para celebrar la consulta.
Mas contrapuso la actitud “democrática, cívica y amiga del derecho” de Cataluña con la de algunas instituciones del Estado a las que acusó de querer impedir la voluntad del pueblo catalán poniendo impedimentos jurídicos y judiciales.
Otro de los sectores que ha manifestado su descontento con la sentencia del 25% son los sindicatos de docentes catalanes, que rechazan “judicialización, politización y utilización electoralista” del catalán en las aulas.
Desde CCOO han indicado que “el modelo de inmersión lingüística nunca ha roto el consenso en la comunidad educativa en más de 30 años” y ha recordado que este modelo garantiza unos conocimientos del castellano similares al resto del alumnado del Estado.
Por su parte, el sindicato Ustec-STES, a través de su portavoz, Ana Elvira Sánchez, ha defendido la inmersión manifestando que “la Educación en catalán ha hecho que ahora tengamos una comunidad autónoma totalmente bilingüe que, además es capaz de hablar otras lenguas a parte del catalán y el castellano”.
Wert discrepa
Desde el Ministerio de Educación también se han querido manifestar respecto a la sentencia del Tribunal Supremo. Wert ha manifestado que el catalán como lengua vehicular fundamental tiene que ser “compatible con la no exclusión del castellano”. De esta manera, ha querido defenderse de las acusaciones que llegaban desde el Congreso, donde el diputado de CiU, Martí Barberà, criticaba que el propio ministro y el PP están llevando a cabo iniciativas legislativas y judiciales para “desestabilizar” el modelo educativo de Cataluña y “su pilar más importante, el modelo de éxito de la inmersión lingüística”.
Wert ha interpretado que los nacionalistas catalanes sostienen, “contra toda evidencia y todos los pronunciamientos de los órganos jurisdiccionales”, que se trata de una medida de segregación y exclusión del catalán, y ha manifestado que “es todo lo contrario” argumentando que el sistema que propone la Generalitat de atención individualizada en castellano conduce a la “discriminación prácticamente idéntica a la separación en grupos de clase por razón de lengua habitual” y que “recuerda a tiempos pasados”, en referencia al franquismo.
Aunque Wert finalmente matizó estas palabras y tachó de “abominable” el trato del catalán en el franquismo, el portavoz de CiU en el Congreso, Durán i Lleida replicó al ministro que en lo único que se parece la situación actual a la “de tiempos pasados” es que “atacando” al catalán “te hacen ministro”, añadiendo que durante el franquismo defender esta lengua suponía “ir a prisión”.