La revolución fintech

La tecnología también produce silogismos:
Premisa A:Las tecnologías de la información y la comunicación revolucionan el empleo en todos los sectores productivos.

Premisa B: Todos los sectores productivos tienen su propia actividad financiera.

Conclusión: La tecnología revoluciona la actividad financiera de todos los sectores productivos y, de paso, el empleo.
“Las finanzas están en cualquier ámbito profesional, todos necesitamos a la banca. Así que las posibilidades que abren tecnología y finanzas son infinitas y la creatividad que permite, lo mismo”.

Los expertos de Innsomnia nos sitúan así ante las puertas de una revolución tecnológica –otra más– de límites insospechados.

Innsomnia es la primera incubadora y aceleradora de startups que, con la colaboración de Bankia, pone la tecnología al servicio de las finanzas: de la propia banca, y de particulares, empresas, autónomos, inversores, aseguradoras…

Perciben el desarrollo ilimitado de la innovación en tecnología financiera como una oportunidad de empleo para programadores, desarrolladores y expertos en ciberseguridad en un mercado –el de las TIC– en el que no se valora tanto el título académico como lo que demuestras que sabes hacer (proyectos, cursos, acreditaciones…).
“La puerta que abren las fintech a los jóvenes programadores es inmensa”, aseguran en Innsomnia. “Ahora mismo están disputadísimos. Pueden empezar en una e irse a otra que les pague mejor”.

Según Spanish Fintech, cada semana aparece un mínimo de dos startups nuevas. En septiembre ya se contaban unas 200.

En Ametic, la patronal tecnológica, su directora de Formación, Esther López, avala el tirón que supone para los programadores el sector financiero y también el de los seguros (insurtech).
“La banca está muy interesada en esos profesionales”, cuenta. “Demanda muchos programadores con vistas al usuario y muchos expertos en seguridad”, aunque son las consultoras y empresas externas de servicios tecnológicos las que contratan a la mayoría.

La unidad de Formación de Ametic es uno de los mayores catalizadores de las necesidades formativas al servicio del empleo tecnológico. Su plan PICE Joven TIC para desempleados menores de 30 años imparte la formación tecnológica que reclaman las empresas. En programación para la banca, se pide, sobre todo, Cobol y Java, asegura Esther López.

Rodrigo Méndez, responsable de Marketing del portal Tecnoempleo (especializado en empleo tecnológico) también constata el reciente aumento de la oferta para informáticos por parte de empresas y startups especializadas en fintech. “Antes solían pedirse perfiles mixtos, con conocimientos financieros, ahora se piden perfiles tecnológicos puros y duros”, matiza.

Desde dentro

Pablo Zapico y Javier Sirgo estudiaron FP superior y trabajan para la empresa Intermark, especializada en proyectos tecnológicos financieros. Zapico es Arquitecto del Departamento de Tecnología, define la línea tecnológica de los proyectos y los procedimientos de trabajo; y Sirgo ha desarrollado varias aplicaciones web e integraciones con pasarelas de pago.
“Nunca he tenido problemas para encontrar trabajo, es un sector que tiene bastante salida”, afirma Pablo. Eso sí: “Nunca he dejado de estudiar. Siempre estoy intentando sacar alguna certificación o algún curso”.

Los dos coinciden en que la Formación Profesional del ámbito tecnológico es limitada, y que los titulados “deben ponerse al día y completar su formación con cursos y certificaciones”.
“Creo que es muy importante investigar por tu cuenta las tecnologías que se usan actualmente y mejores formas de desarrollar tu código”, dice Sirgo.

Zapico, que ha entrevistado a varios candidatos para entrar en su empresa, puntualiza que “es un sector en el que se entra muy verde”, independientemente del nivel académico. “Según llegan a la empresa, veo más preparada a la gente de FP que a la universitaria, quizás porque en FP han visto temas de programación desde el minuto cero”.

Tanto Pablo como Javier consideran que urge mayor relación de las empresas con los centros y los estudiantes de FP. Javier, que entró en Intermark a partir de las prácticas, destaca la importancia de “hacerlas en una empresa que dedique suficiente tiempo a formarte”.
“Sería muy interesante mantener comunicación entre los formadores y empresas del sector”, afirma Zapico. “Hay una base de conocimiento que cualquier persona del sector debería tener, pero la adquieren al final, en sus prácticas con nosotros, cuando sería más interesante que en esas prácticas pudieran potenciar sus conocimientos. Incluso sería positivo que los alumnos tuvieran algún contacto con las empresas antes de sus prácticas finales”.

Con proyectos de FP Dual sería posible.

Bankia FINTECH by Innsomnia
Innsomnia es la primera incubadora y aceleradora de startups que ponen la tecnología al servicio de las finanzas (de la propia banca, o de particulares, empresas, autónomos, inversores, aseguradoras…). Se ha puesto en marcha con la colaboración de Bankia, sin que ésta exija contrapartidas a las empresas.

Según expertos del sector, es el proyecto más audaz y ambicioso de un banco en relación con la innovación tecnológica.

De las 48 candidatas, 15 podrán desarrollar su proyecto. En el gráfico pueden verse los campos fintech en los que trabajan.