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El encarecimiento de la universidad no ha restado alumnos en Cataluña

El sistema de tarifación de los precios de la universidad en función de la renta y las becas Equitat en funcionamiento en Cataluña desde 2012 no han tenido efectos negativos en el acceso a la universidad ni sobre el abandono de los estudiantes universitarios.
RedacciónMartes, 31 de enero de 2017
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El estudio encargado por el Consejo Interuniversitario de Cataluña (CIC), el órgano de coordinación del sistema universitario catalán y de consulta y asesoramiento del gobierno de la Generalitat, elaborado por el catedrático de Economía de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) José García Montalvo, señala que el nivel de precios públicos de la universidad "no es relevante", lo importante es si estos precios "tienen impacto sobre las tasas de acceso y abandono".

Durante la presentación del estudio en Barcelona, el catedrático ha defendido que precios públicos cero para las universidades "no pueden ser siempre y en cualquier situación la mejor solución". En un sistema con elevado nivel de recaudación impositiva como el alemán o el escandinavo "es lógico que la universidad sea gratuita o casi gratuita", argumenta el estudio, sin embargo "en uno que recauda poco como el catalán no es lógico que el precio de la universidad sea bajo o nulo para todos". "Lo mínimo exigible es que exista coherencia entre las propuestas impositivas y los precios públicos", según Montalvo, y en este sentido ha concretado que "si se quiere subir los impuestos a las familias que ganan más de 60.000 euros será porque no contribuyen suficiente a los servicios públicos".

El estudio también concluye que los precios de la universidad catalana establecidos en función de la renta y el funcionamiento de las becas Equitat han permitido "revertir, al menos parcialmente, la insuficiencia financiera de las universidades y aumentar la progresividad del sistema tributario".

Según el estudio, "es mucho más eficiente" la redistribución que se produce en la universidad catalana que el de otras comunidades autónomas, ya que aquí "los precios públicos pagados por familias con mayor poder adquisitivo subsidian de forma indirecta a las familias con ingresos bajos".

Por nivel socioeconómico, la subida de tasas de los últimos años no ha afectado al acceso de estudiantes según el tipo de colegio de procedencia y desde el curso 2012-13 "se observa un aumento de los estudiantes procedentes de escuelas públicas por encima de los que provienen de la concertada o la privada".

Los estudiantes de familias con bajo nivel educativo tienen entre un 50 y un 60% más de probabilidad de contar con excención de matrícula que la media, concluye Montalbo en su estudio, y aquellos cuyos padres tiene un trabajo no cualificado superan el 40% de la probabilidad, por el menos del 10% de las profesiones asociadas a título universitario.

La calidad del servicio universitario en Cataluña es "mejor que en ninguna otra comunidad autónoma", ya que "cinco de las universidades catalanas se encuentran entre las mejores del mundo" valora el informe.

Comparando el sistema tarifario catalán con el de la Comunidad de Madrid, el estudio concluye que las tasas son más bajas que las catalanas, y compatibles con la escasa progresividad general del sistema, que favorece que los ricos paguen pocos impuestos y se beneficien de la mayor subvención de los precios públicos en la universidad.

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