Murcia, autonomía destacada en la detección de las altas capacidades
En España hay 19.187 alumnos reconocidos como con altas capacidades, según el último dato publicado por el Ministerio de Educación correspondiente al curso 2014-15. Esto supone apenas el 0,24% del total de alumnado no universitario, lo que da la medida de la falta de un plan sistémico para la detección de las altas capacidades. Sobre todo, si las altas capacidades se plantean en términos relativos, es decir, como alumnado que se sitúa por encima del percentil 98, por lo que debería ser por definición del 2% de estudiantes. En cualquier caso, tampoco parece que haya un trabajo similar de detección en las comunidades. En este sentido, Murcia es, según estos datos ministeriales, la autonomía que más ha avanzado en el terreno, con la detección del más del 1% de alumnado con altas capacidades. Contrasta con el ejemplo de la Comunidad Valenciana, donde existe una normativa bastante avanzada al respecto y, sin embargo, no se ha realizado este trabajo sistemático de detección.
Esto no quiere decir que a nivel centro, éstos no trabajen con programas específicos con este colectivo de alumnado, pero sí evidencia que no hay una estrategia definida en muchas autonomías para dar una correcta respuesta educativa a estos escolares.
Otras autonomías, como Canarias (0,84% de los alumnos de Primaria reconocidos como altas capacidades), Andalucía (0,76% en Primaria) o Asturias (0,70%) también tienen un número notablemente por encima de la media española, que se sitúa en el 0,35% en el caso de los alumnos de Primaria y el 0,39% para alumnos de ESO.
Como señala la consejera de Educación y Universidades de Murcia, María Isabel Sánchez-Mora, con datos más actualizados que el Ministerio, la Región“es líder nacional en identificación de alumnado con altas capacidades,con un 1,66% y 3.808 alumnos, y por ello estamos reforzando la atención educativa a través de más talleres especializados y centros preferentes”. Durante el presente curso escolar hay 30 talleres repartidos en Murcia, Cartagena y Lorca, en los que participan un total de 592 alumnos con altas capacidades. Para ello, la Consejería de Educación murciana ha incrementado en un 40% la inversión para talleres específicos, en los que este año se invierten 56.750 euros.
El alumnado recibe atención específica por parte del Departamento de Orientación de cada centro y de forma específica por parte del Equipo de Orientación de Altas Capacidades. Los profesores de los centros preferentes llevan a cabo un plan de formación concreto para la mejora de la respuesta educativa de estos alumnos.
Asimismo, destacan los talleres extracurriculares, proyectos de trabajo basados en los programas de enriquecimiento que son, a su vez, modelos diseñados específicamente para alumnos con altas capacidades intelectuales. Su objetivo es estimular las aptitudes intelectuales (procesos cognitivos, creativos y afectivos) más destacadas dentro del perfil particular de cada alumno a través de una serie de tareas estructuradas, como solución de problemas, toma de decisiones, creatividad y pensamiento crítico, entre otros.
Protocolo de actuación
Por otro lado, la Consejería murciana cuenta con una red de 28 centros preferentes de atención específica para el alumnado de altas capacidades. Estos centros desarrollan además programas educativos concretos, como el de enriquecimiento curricular, de investigación tutelada, de inteligencia emocional y talleres de creatividad matemática y literaria.
La Consejería presentó recientemente a los Equipos de Orientación Educativa de los centros educativos de Infantil, Primaria y Secundaria el nuevo protocolo de identificación del alumnado con altas capacidades, realizado por el Equipo de Orientación Específico de Altas Capacidades.
El nuevo protocolo incorpora, además de la evaluación de las aptitudes intelectuales de los alumnos, la valoración del desarrollo de sus múltiples inteligencias, el desarrollo de su capacidad creativa, así como los niveles de adaptación tanto al entorno como al propio centro escolar.
Además, siguiendo recomendaciones a nivel internacional, incorpora como novedad “la evaluación del desarrollo de las competencias asociadas a su perfil de excepcionalidad, que permite establecer la respuesta educativa idónea para el alumnado en función de sus necesidades específicas”, señaló la consejera.
Asimismo, se establecen nuevos procedimientos para informar sobre la evaluación psicopedagógica al profesorado, la familia y el alumnado, que se recomienda que se realice por parte del orientador y el tutor, en reuniones individuales con el alumno y la familia. En dicha reunión se informa de los puntos fuertes y débiles del alumno, teniendo en cuenta su perfil de excepcionalidad, las características socioemocionales, el estilo de aprendizaje y el nivel de competencia curricular.
