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Construir un pueblo como proyecto para trabajar las inteligencias múltiples

El “Liceo Europa” de Zaragoza ha desarrollado durante este curso 2016-17 un proyecto en Primaria basado en las inteligencias múltiples de la mano de Amparo Escamilla, directora del equipo Proyectos Pedagógicos.
Estrella MartínezMartes, 27 de junio de 2017
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El “Liceo Europa” de Zaragoza ha desarrollado durante este curso 2016-17 un proyecto en Primaria basado en las inteligencias múltiples de la mano de Amparo Escamilla, directora del equipo Proyectos Pedagógicos, investigadora, autora y asesora en construcción del pensamiento y estímulo a las inteligencias múltiples. Como bien explica Escamilla, trabajar con las inteligencias múltiples implica necesariamente aprender a pensar empleando cada una de las inteligencias.

Como los propios alumnos de Primaria me explican, “hemos aprendido a pensar porque pensar es importante”. Hay uno de ellos que hasta enumera una lista, que él mismo ha desarrollado, con 20 motivos que explican porqué pensar es tan importante, entre los que se incluye, por ejemplo: “Para diferenciar lo que está bien de lo que está mal”.

En esta ocasión el trabajo de las inteligencias múltiples se ha desarrollado de la mano del aprendizaje basado en proyectos y, por supuesto, del desarrollo de técnicas de pensamiento.

Amparo Escamilla acudió al centro –este es uno de los colegios a los que asesora– donde se ha reunido semanalmente con sus profesores y equipo directivo para construir el proyecto. Escamilla respalda el pensamiento de Howard Gardner –padre de las inteligencias múltiples– cuando dice que a nivel educativo se debe reflexionar sobre lo que se está haciendo bien para mantenerlo, al mismo tiempo que hay que estar atento a todo aquello que puede enriquecer el proceso educativo. Escamilla partió de esta premisa con docentes y equipo directivo del centro, a quienes también formó en esta nueva manera de trabajar.

Sin perder nunca de vista el contenido y competencias clave que los alumnos de Primaria debían tener, el equipo de trabajo se puso manos a la obra para desarrollar la nueva propuesta educativa. Como dice Ramón, uno de los profesores, “no se trata de aprender otras cosas, sino de aprender lo mismo de manera diferente”.

La formación del profesorado era fundamental. Para que un niño se acerque a ti y te hable de técnicas de pensamiento y te explique qué es la rueda lógica o el torbellino de ideas, cosa que sucedió con más de uno de los alumnos, primero los profesores tienen que conocer estas técnicas. Dada la importancia del pensamiento, lo primero, por tanto, era que los profesores se familiarizaran con el análisis asociativo, torbellino de ideas, CTF –Considerar Todos los Factores–, entrevista, diálogo, rueda lógica y círculo inteligente.

Los docentes participaron activamente en la elección y elaboración del proyecto interdisciplinar que se ha desarrollado durante este curso en toda Primaria y que integra las inteligencias múltiples. Las integra hasta tal punto que el proyecto se desarrolló utilizando técnicas de pensamiento: torbellino de ideas sobre los posibles temas, CTF para elegir el tema definitivo y mapa visual para tener una primera idea general de lo que sería.

El proyecto
El proyecto desarrollado ha consistido en la creación de un pueblo: Sweetland. Los alumnos de 1º se encargaron de la granja –animales, huerto–, los de 2º de la vivienda, los de 3º de la Educación y sanidad, los de 4º de las fiestas –identidad y patrimonio cultural–, los de 5º de las energías sostenibles y los de 6º de la organización política y el turismo.

Las familias fueron informadas del nuevo proyecto educativo y de cómo se trabajaría. Participaron activamente de diferentes formas, como en la obtención de materiales como briks de leche o cápsulas del café para que los alumnos elaboraran con material reciclado una maqueta del que sería su pueblo. También, y de manera fundamental, algunos padres y madres fueron al centro para instruir a los alumnos sobre alguna de las áreas que cada curso tenía que trabajar. Así, por ejemplo, en lo referente a la sanidad, los niños más o menos sabrán cómo funciona un centro de salud en Zaragoza capital, pero no en un pueblo, por lo que era indispensable la figura de la médico rural que les contara cómo funciona realmente la sanidad en un pueblo o la charla de otro familiar que trabaja en una granja en el campo.

Todo el trabajo se realizó de manera cooperativa teniendo el pensamiento como base del proceso de enseñanza-aprendizaje en inteligencias múltiples.

Una vez creado el pueblo, los alumnos le dieron un cariz real rodando un documental por curso. Recibieron un guión que sirviera como base, pero flexible para que se pudieran incluir sus aportaciones.

Los documentales incluyen español, inglés y francés. En ellos los alumnos se transforman en los habitantes del pueblo. Así, por ejemplo, los de 3º explican no solo las responsabilidades de los que trabajan en el ambulatorio, sino también cómo se aprende en su colegio a pensar, mientras que los de 6º recrean un pleno del Ayuntamiento, entre otras cosas.

Con el fin de curso finaliza el proyecto. Como afirma Amparo Escamilla: “Todos estamos emocionados con lo trabajado y logrado: cooperación, toma de decisiones, integración del conocimiento, construcción del pensamiento, emoción e ilusión por participar, imaginar y crear”.

Los profesores no ocultan su alegría, aunque reconocen que cuando empezó el curso todo parecía un mundo. Por eso ahora casi que les cuesta creer todo lo que han conseguido. Están emocionados y dispuestos a seguir el año que viene. Y más les vale porque los alumnos corean síes cuando se les pregunta si quieren seguir haciendo proyectos como el del pueblo.

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