“Sería rocambolesco un centro con ciclos concertados y privados a la vez”

Tras suprimir los conciertos en FP Superior hace cinco años, la Consejería de Educación negocia ahora la recuperación parcial de los mismos, tras las sentencias del Tribunal Supremo al respecto, aunque los criterios todavía no están definidos. Hablamos del tema con Ángel Serrano, director del Colegio “Padre Piquer”, uno de los centros históricos de FP de la capital. Para Serrano, no tiene sentido “el hecho de que se puedan concertar solo familias profesionales determinadas” sino que apuesta por “concertar colegios al completo”.

Varios centros han recuperado el concierto de FP Superior tras interponer una demanda contra la Comunidad de Madrid , ¿vosotros no estabais en ese grupo?
Formo parte de la Junta Rectora de Escuelas Católicas de Madrid, por lo que seguí el proceso muy de cerca. Al final fueron solo 11 centros los que optaron por la vía judicial, en ese momento decidimos que intentaríamos otros caminos que no fueran la demanda.

¿Se arrepiente?
Personalmente siempre quise ir por la vía judicial, pero fue una decisión corporativa, ya que tenemos dos titularidades, la Fundación Montemadrid y la compañía de Jesús. En ese momento, la Fundación Montemadrid tenía bastante conflicto interno como para meterse en estas historias.

Tras la resolución de esas demandas y la decisión que ha tomado la Consejería de Educación al respecto, ¿qué va a suceder con el resto de centros?
Esperamos que se arregle, ya que la situación ha sido muy dura para aquellos que no hemos recuperado los conciertos este año, ya que somos la mayoría. En nuestro caso en concreto, un año después ya tuvimos que eliminar un ciclo formativo por falta de alumnos, generado por el alto coste que valía el ciclo y el contexto socioeconómico de nuestro alumnado. Pasar de unas cuotas de 360 euros anuales a más de 3.500 euros era absolutamente inviable. Algunos estudiantes pasaron a ocupar los pocos espacios que la escuela pública tiene en FP Superior y muchos otros dejaron de estudiar. La gran dificultad es que muchos de ellos están en la calle, se han convertido en ‘ninis’ por no tener la posibilidad de acceder a un ciclo formativo por una cuestión claramente económica. Este año, además de la presión que ejerce la enseñanza pública, existen 11 colegios que sí están concertados que atraen a muchos alumnos. Es decir, que los centros que han recuperado el concierto este curso se han llenado. Se ha generado una situación insostenible.

¿Qué os ha dicho la Comunidad de Madrid al respecto?
En eso estamos, no será por las visitas múltiples que tenemos con representantes de la Consejería de Educación para tratar este tema. Vemos que hay un aumento en los presupuestos de un 3,5%, que hay una posibilidad de poder concertar 40 o 50 unidades de FP, pero desconocemos si realmente va a ser así o cuál va a ser el criterio para decidir qué centros o familias profesionales van a recibir esta ayuda. Lo que no vemos es el hecho de que se puedan concertar solo familias profesionales determinadas, tendrán que concertar colegios. La situación sería muy rocambolesca si en un mismo centro hay algunos ciclos concertados y otros privados.

En principio, todavía no existe un acuerdo…
Lo que sí hay que reconocer es que la disposición a hablar con tranquilidad está siempre presente con la actual Consejería de Educación, a diferencia del anterior equipo. La disposición al diálogo es total, con cierta voluntad a solucionar este tema progresivamente. Pero lo fundamental son los criterios que se establezcan.

Entiendo que se muestra más partidario de concertar por tipo de centro más que por tipo de ciclo, ¿verdad?
Sin duda. Los recursos son limitados, pero la cuestión no es la cantidad de los mismos sino su distribución. Es decir, que realmente los recursos públicos vayan a aquellos centros y alumnos que tienen más necesidades. Me gustaría aclarar que cuando hablamos de la Concertada, hay dos tipos de escuelas. En este sentido, existe una escuela concertada que trabaja desde hace muchas décadas con una misión clara de atender las situaciones de mayor vulnerabilidad. Habría que dar un valor añadido en la selección a estas escuelas que llevan tantos años trabajando en FP y que optan por un modelo vertical, en el que se da posibilidad a los alumnos para que sigan estudiando y progresando. Creo que esta cuestión debe estar por delante de otros criterios que dan una mayor visibilidad actualmente como, por ejemplo, la empleabilidad o los proyectos de FP Dual. Hay muchos aspectos añadidos al currículo que hay que tener en cuenta, no solo las cifras de empleabilidad de un momento determinado.

¿Cree que con el programa de becas que sustituyó a los conciertos se le hizo un gran favor a las universidades privadas?
Claro que sí, ya que muchos alumnos universitarios pueden pedir estas becas. Nuestros centros no pueden cambiar de forma sencilla la FP que tienen, por la limitación en espacios y recursos. Por lo que plantear las cosas desde la oferta y demanda actual resulta inviable y no es justo que los alumnos no puedan acceder a nuestra propuesta. Ser pobre no significa no ser inteligente o trabajador, hay que romper esa barrera. Llevamos 50 años demostrando que eso no es así y que si la escuela es inclusiva, todos pueden llegar a término. La universidad ha descubierto que los mejores alumnos que puede tener son aquellos que derivan de FP, con la cabeza mucho más amueblada y con conocimientonsespecíficos más amplios que los estudiantes que vienen de Bachillerato.

El argumento que se dio desde el anterior equipo de Gobierno defendía que el modelo de becas dinamizaba el sector y lo hacía más competitivo y menos asistencial o proteccionista…
Ningún sistema de becas o concierto debería dar la estabilidad a un centro para no preocuparse de nada más. Además, eso nunca ha sido así, los conciertos tienen sus limitaciones. A día de hoy la FP también mira a la excelencia y la innovación. Eso se refleja en el trabajo de los centros, en unos más y otros menos. La competencia es grande, hace tiempo los padres y los alumnos elegían los centros por proximidad, a día de hoy se mira mucho esta elección. A los alumnos de FP Superior no les da igual una familia profesional en un lugar que en otro. Si como centro no tienes valores añadidos a tu oferta es probable que te quedes sin estudiantes.

¿Por qué cree que una institución como los Salesianos ve bien el modelo de becas?
Es cierto que los Salesianos cuentan con varios centros en Madrid, por lo que trabajar con esta visión no es lo mismo que hacerlo desde el punto de vista de un solo colegio. Tienen mayor capacidad de movimiento, por la diversidad de sus familias profesionales, sus alumnos y su contexto. Esto genera unas posibilidades que otros no tenemos. Lo que sí creo es que tienen la posibilidad de organizarse de otra forma. Si la Consejería les ofrece la posibilidad de recuperar los conciertos lo verían con tanto agrado como todos los demás, ya que al final se trata de dar oportunidades al mayor número de jóvenes.