El Consejo Asesor inicia su trabajo para vigilar la materia de Historia
El Consejo Asesor para la Enseñanza de la Historia celebró la pasada semana su sesión constitutiva y comenzó a funcionar con el objetivo de ayudar a evitar la comisión de tergiversaciones históricas en materiales educativos y culturales. En la reunión celebrada en el Departamento de Educación, participaron el director general de Planificación y Formación Profesional, Ricardo Almalé, y los miembros designados, todos ellos expertos reconocidos en el ámbito académico, según informa el Ejecutivo aragonés.
A propuesta de la Universidad de Zaragoza, se integran en este Consejo la profesora titular de en el área de Didáctica de las Ciencias Sociales, Mª Pilar Rivero, y el decano de la Facultad de Filosofía y Letras, Eliseo Serrano. Además, y como estaba estipulado en el decreto de creación de este órgano, tres personas más se suman a este cometido por designación del Departamento: la profesora del Departamento de Historia Moderna y contemporánea, Carmen Frías; el catedrático de Historia Antigua y académico correspondiente de la Real de la Historia, Guillermo Fatás; y el investigador y colaborador del Departamento de Historia Medieval, José Ángel Sesma.
Almalé explicó en esta sesión las razones por las que se crea este órgano y las actuaciones que hasta ahora ha desarrollado la Administración para evitar las tergiversaciones históricas, a la vez que recordó la organización y funciones del Consejo.
Prevención de errores
El Consejo nace de la voluntad del Departamento de Educación por prevenir e impedir que se produzcan errores en los contenidos relacionados con la historia, y en particular de la historia de Aragón, que se difundan en el ámbito de la Educación no universitaria, así como en otros foros. Su labor se va a centrar especialmente en los contenidos curriculares que se aprueben en las comunidades autónomas, publicaciones y materiales digitales, aunque también asesorará sobre documentación relacionada con el patrimonio de Aragón.
El director general subrayó el papel del Consejo Asesor para “resaltar la historia, las instituciones y la cultura de Aragón” en la enseñanza y para proponer modificaciones o nuevas creaciones curriculares. Según indicó, se va a habilitar un mecanismo de colaboración y recepción de solicitudes, quejas y preguntas que puedan surgir en los centros “y nos puedan decir cómo mejorar el currículum y la enseñanza de la Historia”.
Así, el Departamento de Educación va a plantear la posibilidad de establecer un currículum por competencias, no solo por contenidos, ya que “los profesores de enseñanzas medias nos dicen que los contenidos de los currículos ministeriales son muy excesivos y es complicado llegar a toda la dimensión conceptual de los mismos en Historia y Geografía”, comentó Almalé. A su entender, si se trabaja en el currículum por competencias “generamos un valor añadido y se contribuye a que los alumnos comprendan mejor y sepan qué ha pasado, cuál es la historia de Aragón y cómo influye en el presente y el futuro”.
El Consejo se reunirá al menos dos veces al año y si surge “alguna consulta o cuestión importante, también convocará”, apuntó Almalé. Según precisó el director general, “además de los miembros habituales, se podrá contar con personas de reconocido prestigio que vengan a asesorar en cuestiones puntuales”.