Ideas para fomentar la lectura entre “primeros lectores”
La lectura es la principal herramienta que acerca a niños y niñas al conocimiento. Una herramienta que mejora sus habilidades lingüísticas y que les ayuda a desenvolverse en su vida cotidiana. Además leer favorece su autonomía personal y su pensamiento crítico.
Por todo ello resulta fundamental formar lectores competentes con un arraigado hábito lector. Ayudar a las familias a conseguirlo es, también, tarea de la escuela y para ello podemos facilitar algunas directrices.
¿Cómo podemos fomentar la lectura durante los primeros años?
Generar momentos de lectura compartida. Crear un tiempo de lectura al día en un lugar tranquilo, o aprovechar los fines de semana para realizar actividades en familia ayudará a que los más pequeños asocien el acto de leer a un tiempo placentero y dedicado a ellos.
Mostrarles la utilidad de la lectura, haciéndoles descubrir que es una maravillosa fuente de conocimiento. Leerles el significado de una palabra en el diccionario o enseñarles una fotografía en un libro de aquello que desconocen les hará comprender la utilidad de los textos.
Respetar sus elecciones, permitiéndoles seleccionar sus lecturas en función de sus intereses e inquietudes. Para ello resulta vital proporcionarles diversidad de opciones textuales en diferentes soportes.
Leerles el significado de una palabra en el diccionario o enseñarles una fotografía en un libro de aquello que desconocen les hará comprender la utilidad de los textos
Fomentar el uso de espacios vinculados a la lectura (bibliotecas, librerías, teatros, museos…). Visitar periódicamente la biblioteca municipal de nuestro municipio es una actividad muy recomendable.
Mostrar interés por sus progresos lectores. Al interesarnos por sus lecturas nos acercamos a sus intereses e inquietudes, otorgamos un valor añadido al acto lector y, fomentamos las relaciones afectivas.
Crear su propia biblioteca. Es importante dedicar un espacio concreto para que puedan colocar sus libros ordenadamente y acceder a ellos con facilidad.
No dejar de lado el soporte digital, con sus atractivas propuestas, para favorecer el hábito lector. Para los niños la lectura en dispositivos es un acto natural.
Regalar libros ayudará a que los pequeños identifiquen el acto de leer como algo valioso e importante.
¡Creemos momentos especiales de lectura que pasen a formar parte de su memoria familiar!
- Un momento de lectura “ideal” debe ser un tiempo placentero y divertido, nunca una obligación en el calendario semanal.
- Apaguemos la televisión, los móviles y demás dispositivos para centrar la atención y disfrutar el momento compartido. Siempre que el dispositivo no sea el soporte de lectura elegido, claro.
- Comentar las lecturas genera una oportunidad única de favorecer la expresión oral y el espíritu crítico en los niños. Leer sin compartir impresiones, no es lo mismo.
- Los textos y formatos seleccionados deben estar en consonancia con la edad del niño o niña y con su destreza lectora.
- Carecer de tiempo para leer con los peques, no es excusa, pueden ser ellos los que lean mientras se realizan otras tareas (cocinar, planchar…).
Un momento de lectura “ideal” debe ser un tiempo placentero y divertido, nunca una obligación en el calendario semanal
¿Qué podemos leer?
A partir de los 6 años es importante propiciar tiempos de lectura diferenciándolos claramente de las actividades escolares, valorar sus esfuerzos y comentar con ellos los textos.
Estos pueden atender a temas variados de su interés:
- Aventuras: detectives, pandillas, intriga, miedo…
- Cuentos fantásticos y narraciones mitológicas.
- Historias de la vida real (familia, escuela, conflictos personales…)
- Libros informativos sobre animales, deportes, pueblos, países, ciencia, manualidades…
- Comics de superhéroes o de humor.
- Colecciones de aventuras de un mismo personaje.
A partir de los 10 años, si han leído con frecuencia, suelen tener claro lo que les gusta. No hay que empeñarse en que lean lo que a nosotros nos gustó a su edad.
Algunas sugerencias:
- Narrativa realista: relaciones de amistad, primer amor, conflictos personales…
- Novelas que hayan inspirado películas de acción juvenil.
- Historias de suspense sobre temas misteriosos, lo desconocido, historias policíacas…
- Temática de ciencia-ficción.
- Iniciación a “los clásicos”: La isla del Tesoro…
- Biografías de personajes interesantes.
- Textos informativos sobre temas científicos, profesiones, tecnología…
- Revistas juveniles.
- Comics y sencillas novelas gráficas.