Joan Mena (Unidas Podemos): "La ley Celaá se queda corta, solo para los golpes más duros de la Lomce”

Nacido en Sabadell en 1975, Joan Mena es el portavoz de Educación y Formación Profesional del grupo confederal de Unidas Podemos-En Comú Podem-Galicia en Común. También es portavoz adjunto en la Comisión de Presupuestos, presidente de la Comisión de Seguimiento de la Estrategia Española ODS y en la de Interior y RTVE. Es diputado por Barcelona.

El 13 de marzo, la víspera de decretarse el estado de alarma, se encomendaba el dictamen de la Lomloe a la Comisión de Educación y se daba hasta el 31 de marzo para presentar enmiendas. Ese plazo está suspendido, pero ¿cuáles tenían preparadas?
—La Lomloe que llegó al Congreso es la propuesta del PSOE y ahora hay un Gobierno de coalición y debemos intentar que la ley sea lo más cercana posible a lo que piensa este Gobierno. Nos habíamos puesto ya de acuerdo en la metodología de enmiendas conjuntas y en defender entre todos articulado de la ley. Hay distintos paquetes de enmiendas. Uno, para reforzar el 0-6, y en especial el 0-3, que se ha tratado como asistencial y de conciliación cuando ha de ser un pilar para garantizar el derecho a la Educación, hacer una etapa fuerte, fuera de la especulación, centrada en lo público. El segundo paquete se dirige precisamente a garantizar que la Pública es la columna vertebral del sistema educativo como sostienen la Constitución y la mayoría de las leyes educativas del país. No se trata de menospreciar ningún otro sistema, pero la Pública es la que garantiza la cohesión social y la igualdad de oportunidades y se ha de blindar. También hemos trabajado con los compañeros del PSOE para garantizar la democratización de los centros, recuperar el papel de los claustros, los consejos escolares, asegurando una dirección más plural y haciendo a la comunidad educativa corresponsable de la gestión, huyendo del modelo jerárquico que impuso el PP. El cuarto paquete es el del currículum. Se trata de ver no solo cómo garantizamos que se va a recuperar Filosofía, Ética, también lo que en su día se llamó Educación para la Ciudadanía a través de una asignatura que garantice los valores, una Educación basada en los Derechos Humanos, lo que incluye el respeto a la diversidad familiar y los derechos de las personas Lgtbi.

Las escuelas infantiles privadas creen que no es posible la universalización del 0-3 sin ellas.
—Si lo público no garantiza aspectos más básicos se produce un agujero y la privada genera ofertas. Es cierto que no se puede recuperar todo lo que no se ha hecho en 40 años en 0-6 en un año, nos debemos marcar un tiempo de transición para que desde lo público se genere una red potente, con una oferta clara y bien estipulada. La situación es muy dispar por comunidades, con mucha oferta privada, también de muchos ayuntamientos… Ahora hay que ver cómo se articula y se unifica un sistema con todas las garantías.

¿Ven timorato el texto que llegó al Congreso?
—Sí, se queda corto. Solo para los golpes más duros de la Lomce. Nosotros queremos aprovechar y no solo derogar los golpes más duros y contra la Educación pública, no solo frenar lo que hizo la derecha, sino avanzar en un sistema educativo democrático al servicio de los retos de la España del siglo XXI, incorporando las propuestas que en este tiempo ha ido haciendo la comunidad educativa.

¿Cuáles son esos golpes duros?
—Pensar que la Educación no es una herramienta para garantizar la cohesión social y la igualdad de oportunidades. Recurrir a métodos como rankings entre centros, generando competición en lugar de cooperación en el sistema educativo en España. Que el alumnado tenga que elegir currículum en 2º o 3º de ESO, lo que ya predefine su futuro cuando con 12, 13, 14 años no tienen las cosas claras y lo que se han de habilitar son pasarelas que te permitan cambiar lo previsto y reincorporarte al sistema en cualquier momento. También son golpes duros los decretos que llevaron al despido de profesores de la Pública, al cierre de líneas de escuelas públicas mientras surgían escuelas de élite que garantizan la segregación. El principal problema en la Educación en España hoy es la segregación, la separación de unos alumnos de otros. Predefine el futuro y garantiza que pasarelas, en cualquier momento de participación en sistema reincorporar y cambiar lo previsto. Con 12, 13, 14 no cosas claras qué hacer en el futuro y golpes con decretos y medidas puntuales. Se ha despedido a profes de la pública, se cierran líneas de escuelas públicas y más de élite que garantizan la segregación. El principal problema en la Educación en España hoy es la segregación, la separación de unos alumnos de otros.

¿Cree que debe haber un plan?
— Sí, creo que se debe elaborar un plan, y que se va a hacer. Es uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que se garantice un sistema educativo público que logre la cohesión social y luche contra la segregación por sexo, origen, lengua o, lo que más ocurre en España, condición socioeconómica. Tanto la Vicepresidencia segunda como la Secretaría de Estado para la Agenda 2030 tienen competencias en el ámbito educativo para cohesionar y garantizar los ODS, y ese es uno de los elementos que va a trabajar el Ministerio.

Se habló de usted como posible ministro de Universidades y se dijo que los rectores no querían a un profe de instituto, ¿cómo ve la escisión en dos ministerios?
—Se barajaron muchos nombres. Que alguien no venga del mundo universitario no es una justificación para que no sea ministro de Universidad, se pueden valorar otros aspectos. En cuanto a la división, el propio Castells lo dijo en su toma de posesión y lo comparto. Seguramente no es la mejor de opciones. Castells y Duque lo están salvando con un mecanismo de cooperación entre Universidades y Ciencia e Innovación para que funcionen de forma muy coordinada, que es lo que España necesita.

Participó en la subcomisión para el pacto, ¿este es posible?
—Nos podemos poner de acuerdo en algunas cosas muy globales y generales. Todos compartíamos que era necesaria más inversión en Educación. Ha sido uno de los déficits con gobiernos de diferentes colores. La media de la UE está en el 6% y en España estamos en el 3,9%. Deberíamos aspirar al menos al 5%. Si solo nos pusiéramos de acuerdo en eso ya habríamos hecho un pacto por la Educación bastante importante. El segundo sería que todas las organizaciones políticas nos comprometiéramos a sacar la Educación de la confrontación partidista. Esta es legítima, pero la Educación debería quedar fuera o estaremos dañando una pieza fundamental del sistema democrático.

¿Cómo ve este curso anómalo?
—De todas las crisis podemos sacar aprendizajes, aunque no mientras duran. De la de 2008 aprendimos que no se pueden recortar servicios públicos: sanidad, Educación, que pone los cimientos democráticos de una sociedad… El Ministerio está priorizando lo que las autoridades sanitarias determinan sobre la recuperación de la actividad presencial y al tiempo evitará que sea un curso perdido, garantizará que se cumplen los objetivos.

• Inmersión. Charnego, se educó en la escuela pública catalana. Defiende que la inmersión es el único sistema que garantiza la competencia lingüística en las dos lenguas oficiales.
• Interinidad. Ha sido profesor interino de Lengua Castellana y Literatura en diversos institutos durante 15 años.
• Excedencia. Quiere volver a la docencia. Echa en falta debates pedagógicos profundos y no “de maquillaje”, que no abordan los problemas del sistema.