Concha Andreu destituye a Luis Cacho como consejero de Educación
Concha Andreu explica los cambios en el Ejecutivo la tarde del lunes 3 de agosto.
La presidenta de La Rioja, Concha Andreu, compareció en rueda de prensa de urgencia la tarde del lunes 3 de agosto para anunciar la destitución del consejero de Educación, Luis Cacho, al que sustituirá en el cargo Pedro Uruñuela. En el mismo acto informó además de que la nueva portavoz del Gobierno será la consejera de Salud, Sara Alba, que releva al cesado Chus del Río. Según Andreu, no se prevé una «remodelación más profunda» de un gobierno de coalición surgido hace menos de un año y se cumplirán «a rajatabla» los compromisos adquiridos en el acuerdo de legislatura.
El cese de Cacho, «de mutuo acuerdo», según Andreu, llega después de que El Confidencial revelara la semana pasada la fuga a Luxemburgo de la sociedad de inversión de capital variable (sicav) que gestiona el patrimonio del ya ex consejero, de más de 38 millones de euros según su declaración de bienes.
Según la presidenta, «las últimas informaciones surgidas sobre circunstancias personales que afectan al consejero Cacho marcan un límite que ya no quiero superar; no se puede ser más injusto con él y todo esto afecta de manera directa a su honorabilidad«. Andreu aprovechó su comparecencia para destacar la trayectoria de Luis Cacho, «entregada a su trabajo, apasionada de la innovación social y educativa», y agradecerle su labor durante la pandemia para garantizar la continuidad educativa.
Por la mañana, el secretario del PSOE en La Rioja y consejero de Gobernanza, Francisco Ocón, había aseverado que el empleo de una sicav no casa con la postura del PSOE hacia ellas, palabras a las que Andreu respondió: «Un compañero de Gobierno debe apoyar a un compañero de Gobierno».
Andreu defendió también el proyecto iniciado por Cacho como «la piedra angular de la propuesta educativa del Partido Socialista», pero lo cierto es que la tormenta destapada en el PSOE riojano se suma a la que desde hace semanas se viene fraguando en la comunidad educativa riojana.
Así, la Mesa Sectorial de Educación celebrada el pasado viernes para abordar el Plan de Contingencia General de Educación para el curso 2020-21 concluyó sin acuerdo y con la petición de dimisión de Luis Cacho por parte de algunas de las organizaciones sindicales, como ANPE, UGT o CSIF. El primero lamentó el tiempo perdido. El segundo aseveró que «lejos de aportar tranquilidad y soluciones ante los problemas que se han producido como consecuencia de la Covid-19 la gestión de Cacho ha conseguido provocar aun más conflictos». Para el tercero, la negociación es una «burla» y el plan «deja parte de la seguridad sanitaria de los centros en manos de sus equipos directivos». El plan había sido rechazado también por los sindicatos CCOO y STAR, así como por la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos.
En una semana ajetreada, la presión sindical, con encierro de seis miembros de CCOO incluido, logró que la directora general de Educación, Pepa Iriarte, suscribiera la reducción de la jornada lectiva en Secundaria de 21 a 18 horas así como la contratación de 220 a 300 profesores de apoyo.
La destitución de Cacho generó reacciones entre la Plataforma por la Libertad de Enseñanza de La Rioja, que se mostró esperanzada en que su sustituto «sea capaz de reconducir el rumbo y no discrimine a la Educación pública concertada, que aglutina a más del 30% del alumnado, entendiendo la convivencia entre redes como uno de los pilares para avanzar hacia una Educación mejor para todos». La entidad recordó que llevaban meses reclamando el cese de Cacho «por el ataque a la Concertada y el caos que han generado sus políticas en todo el sistema educativo riojano».
En el mismo sentido, desde el PP se lamentó que Cacho, «con su autoritarismo y escasa voluntad de consenso», hubiera logrado poner a toda la comunidad educativa en su contra y denunció su irresponsabilidad al abordar las medidas para el próximo curso. Se va, según el partido, «marginando la Concertada con la supresión de líneas, la eliminación de ayudas al Bachillerato concertado y las ayudas de gratuidad de libros de texto y dejando tras de sí un triste récord de renuncias y dimisiones entre su equipo».
En cuanto a Vox La Rioja, pidió responsabilidades tras el cese y criticó que el Gobierno riojano «mientras presume de lo público y predica la necesidad de la honestidad y ejemplaridad, sólo muestra falta de transparencia y ocultación de la realidad».
Con la Mesa Sectorial de Educación para analizar la modificación de la fase 1 del Plan de Contingencia General y negociar las siguientes fases aplazada al miércoles 5, no es menor la tarea por delante del nuevo consejero de Educación, Pedro Uruñuela, desde este mismo mes de agosto.
Nacido en Logroño en 1947, Pedro Uruñuela es el presidente honorífico de la asociación Convives y se ha caracterizado por su defensa de la Educación pública, con apoyo a entidades como Yo estudié en la Pública.
Licenciado en Filosofía por la Complutense y en Enfermería y Fisioterapia por la UNED, ha sido profesor de Enfermería y catedrático de Bachillerato, director de centros educativos e inspector de Educación. Además, fue coordinador general de Educación en la Consejería de Castilla-La Mancha en los noventa y subdirector de la Alta Inspección del Ministerio de Educación durante el primer gobierno de Rodríguez Zapatero, con Alejandro Tiana como secretario de Estado.
Durante esa etapa fue el responsable del Plan Estatal de Convivencia Escolar del Ministerio de Educación. Precisamente esta primavera el Ministerio preveía relanzar este plan y revitalizar el Observatorio de Convivencia, y ya había contactado con Uruñuela, pero la pandemia de coronavirus se cruzó por el camino.
