Madrid comenzará el curso con semipresencialidad
El consejero de Educación y Juventud, Enrique Ossorio, en una imagen de archivo. CAM
La Comunidad de Madrid no va a empezar el curso con clases presenciales en su totalidad, sino que el regreso a las aulas se hará con una modalidad mixta, en la que los niveles de enseñanza de Infantil y Primaria acudirán a los centros y los de mayor edad combinarán la asistencia con la enseñanza telemática.
El consejero de Educación regional, Enrique Ossorio (PP), confirmó el viernes 21 que el inicio de curso se parecerá al segundo escenario de los cuatro previstos, donde el primero era la presencialidad al 100%, aunque este plan se están ajustando a la situación epidemiológica y se conocerán en detalle el próximo martes, 25 de agosto.
Ossorio señaló en una entrevista en Onda Madrid que seguirá las recomendaciones dadas por el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero: “En materia de epidemia lo que diga Sanidad es lo que tenemos que hacer”.
«Podemos parecernos al escenario dos”, ha afirmado Ossorio, que trabaja en un plan que mantiene pero adapta los cuatro escenarios previstos.
En el segundo prevén que “los más pequeños van todos, pero menos alumnos por aula, y que los mayores una parte de la enseñanza fuera online y otra presencial”, ha detallado Ossorio en una entrevista posterior en Esradio.
Prevén que los más pequeños vayan todos, pero con menos alumnos por aula, y que los mayores combinen enseñanza presencial y online
El consejero admitió que todos deseaban una vuelta 100% presencial, incluido el vicepresidente madrileño Ignacio Aguado (Cs) que ayer defendió esta opción, pero que este escenario se planteó esperando contagios “más bajos”. Al tiempo matizó que no se trata de que los niños se queden en casa, dado que este escenario, el tercero, solo se daría si llegara un nuevo confinamiento.
La Consejería de Sanidad ultima un protocolo junto a Educación que se dará a conocer el próximo martes en el que se detallarán aspectos como en qué condiciones se cierra un aula si se producen contagios o los test serológicos para alumnos y docentes.
El nuevo plan partirá de los cuatro escenarios ya conocidos: «Hicimos unos escenarios y queremos ser fieles con ellos porque los docentes tenían esos escenarios y han pensado cómo adoptarlos».
Madrid plantea además la posible contratación de 8.500 docentes y, aunque contratará personal sanitario, ve “imposible” conseguir sanitarios para cada uno de los 2.000 centros educativos de la región.
Respecto a las ratios de las clases el consejero señaló que es un “problema” que no se puede cambiar no en meses sino en años y ha agregado que habrá que hacer grandes esfuerzos en función de las decisiones que se tomen. Al tiempo insistió en que el problema no es tanto de profesorado como de espacio, por lo que están buscando opciones junto a los ayuntamientos.
Preguntado sobre las familias que prefieren que sus hijos no acudan al colegio, Ossorio señaló que la educación es “obligatoria” y hay protocolos de absentismo si el padre decide que el niño no vaya, aunque se tendrá en cuenta la incertidumbre de la situación. Al tiempo insistió en que se buscará la máxima seguridad y en que los niños «padecen menos la enfermedad».
El consejero Ossorio volvió a cargar el viernes contra la huelga de profesores que califica de “política” y afeó que “en una situación tan trágica” y con “tantas muertes” y “personas que van a ir al paro”, profesores “que tienen un sueldo público” hagan huelga.
Del mismo modo acusó a los sindicatos convocantes de “aprovechar” la pandemia para hacer sus reivindicaciones “habituales”, como criticar las privatizaciones. Además, diferenció a los sindicatos «responsables», que no han convocado paros (ANPE y CSIF) de los que han anunciado protestas (CCOO, UGT, CGT y STEM), por no haber esperado a la concreción del plan y adoptar la huelga «como primera medida».
Para el consejero, «afortunadamente» no conocen casos en Madrid de profesores que no quieran ir a trabajar por el riesgo de contagio, lo que a su juicio sería un «ejemplo horrible»: “Cuando hemos estado confinados todos había gente que trabajaba para que comiéramos, para curar en los hospitales, para que tuviéramos luz en las casas. Si esas personas también hubiesen tenido miedo y no hubiesen ido a trabajar pues nos hubiésemos muerto de hambre, no hubiésemos tenido luz, se hubiesen muerto todos los enfermos . Todos tenemos que arrimar el hombro en una situación como ésta y no poner dificultades”, agregó.
