Cómo acompañar en caso de tener que confinar un aula por COVID-19

PALABRAS MÁGICAS: ¿CÓMO OS SENTÍS?

Suena el teléfono en el colegio, una madre nos comunica que su hijo ha dado positivo en COVID, se activa el protocolo. Hay que confinar la clase.

En los centros educativos hemos vivido esta situación en algún momento o la vamos a vivir en los próximos meses. Tras varias experiencias, sabemos que esta información genera en la Comunidad Educativa una reacción emocional que puede ser distinta en cada persona, pero común en muchos casos.

Hubo un silencio y como si de palabras mágicas se trataran, dos de ellos comenzaron a llorar.

¿Qué podemos hacer desde los centros educativos y desde las familias para poder acompañar estos procesos?

La primera vez que confinamos un aula en el colegio donde trabajo, el alumnado estaba en casa y no acudió al centro hasta 15 días después. A la vuelta, les preguntamos ¿cómo se sentían? Hubo un silencio y como si de palabras mágicas se trataran, dos de ellos comenzaron a llorar. Fue entonces cuando tomamos conciencia de lo importante que era hacer un acompañamiento emocional en este proceso.

Os propongo algunas ideas y sugerencias para abordar esta situación con nuestros niños y nuestras niñas, tanto en la escuela como en la familia:

-Establecer en el centro educativo un “protocolo de actuación emocional” para llevar a cabo con todo el alumnado.

-Hablar con la familia y contarles el trabajo que se pretende llevar a cabo en el aula o centro para darles también herramientas que les permitan trabajar en casa.

-Favorecer en las niñas y niños, pero no forzar, la expresión de sentimientos y emociones. Dejar la expresión libre. Hay que estar cerca, pero sin agobiar. Hay niñas y niños que en gran grupo tienen dificultades para expresarse por lo que debemos estar con mucha atención ante cualquier situación y que sientan nuestro apoyo.

-Proponer actividades de despedida o de reencuentro. Puede ser muy interesante realizar un recibimiento especial tras el confinamiento, generar dialogo en la asamblea de aula de qué cosas hemos hecho en casa, cómo nos hemos sentido, que acontecimientos especiales han ocurrido en las casas, etc.

-“El buzón de los deseos”. A veces puede ser difícil poner palabras a todo lo que nos pasa, lo que sentimos. Tener un buzón o caja, donde expresemos nuestros sentimientos en los días de confinamiento.

-“Bote de los miedos”. En este bote propondremos meter los sentimientos de miedo e inseguridad que nos ha provocado este momento.

-Dar espacio en el aula o la familia para conversar y ayudarles, mediante preguntas, a que lleguen a pensamientos que disminuyan la intensidad de las emociones o les ayuden a gestionarlas totalmente.

-Leer cuentos, películas, canciones para identificar y gestionar emociones.

-Realizar actividades artísticas para la expresión de emociones, una carta o historia colectiva expresando los sentimientos o los recuerdos que tenemos de los días de confinamiento, etc. Muchos niños también pueden tener sentimientos muy positivos sobre compartir este tiempo con sus familias, sus juegos sus deseos.

-Realizar actividades para que puedan calmarse cuando sientan miedo, enfado o tristeza.

En estos momentos que vivimos con el COVID 19, nuestras vivencias dependen también de nuestra gestión emocional y en ella son muy importantes los lenguajes de comunicación que utilizamos.  Uno de estos lenguajes, las palabras, nos puede ayudar. En forma de preguntas,  palabras de acompañamiento, palabras desde el corazón… pueden llegar a ser mágicas.