El 28% de los alumnos extranjeros cree que sus profesores no confían en ellos
En alumnos nacidos en España, el porcentaje de estudiantes que no creen que sus profesores tengan expectativas respecto a la continuidad de sus estudios son el 13,7%. © ADOBE STOCK
Así lo revela un estudio del Centro de Estudios e Investigación en Migraciones de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) que se ha presentado este miércoles en un debate monográfico sobre educación e inmigración organizado por el Observatorio Social de la Fundación la Caixa. El estudio, que forma parte de un proyecto europeo, contó con la participación de más de 3.700 jóvenes de 4º de ESO, Bachillerato, ciclos formativos y programas de Formación Ocupacional de Cataluña.
En la jornada, en la que se han abordado cuestiones como la falta de recursos de la Educación pública, la segregación o las peores condiciones socioeconómicas de la población migrada, también se ha presentado un informe del Centro de Estudios Demográficos sobre la influencia de la trayectoria migratoria en el abandono prematuro escolar y otro de la Universidad de Barcelona que analiza el efecto de las olas migratorias en el sistema educativo.
En el primer caso, la profesora de la UAB y autora del estudio, Sílvia Carrasco, ha destacado la importancia crucial de la percepción de apoyo docente por parte de los alumnos, además de una buena vinculación escolar, como factores clave que protegen ante el riesgo de abandono escolar temprano. Al respecto, ha subrayado que la escasa confianza que los alumnos extranjeros perciben por parte de sus profesores es una de las causas principales del abandono escolar.
Carrasco ha remarcado que esta percepción de bajas expectativas contrasta con las altas aspiraciones que estos mismos alumnos tienen de seguir los estudios y acceder a la universidad o a un Grado Superior (72,4%), así como el apoyo que sienten de sus familias para llegar a estudios superiores (73,4%).
Sílvia Carrasco ha destacado la importancia crucial de la percepción de apoyo docente por parte de los alumnos, además de una buena vinculación escolar
En el caso de los alumnos nacidos en España, el porcentaje de estudiantes que no creen que sus profesores tengan expectativas respecto a la continuidad de sus estudios son el 13,7%. «Nos encontramos con una paradoja letal, en el momento en el que el profesorado y los centros deben tener más recursos para promover las aspiraciones de los alumnos es cuando se populariza la idea de que estos alumnos no tienen aspiraciones o que las familias no se preocupan», ha lamentado Carrasco, que ha insistido en la necesidad de dotar al sistema educativo de más recursos.
En la misma línea de fortalecer la Educación pública también se ha pronunciado la profesora de la Universidad de Barcelona Lídia Farré, que en su trabajo ha constatado que desde las olas migratorias de principios del siglo XXI los alumnos inmigrantes se han concentrado mayoritariamente en los centros públicos, provocando un incremento de familias autóctonas de clase media que matriculan a sus hijos en centros concertados o privados, donde hay menos inmigración. Según el estudio, en 2018 los centros públicos españoles tenían una media de un 12% de alumnado inmigrante, mientras que en los concertados y privados era la mitad, un 6%.
Farré ha enfatizado que el abandono de la Educación pública por parte de las clases medias provoca la segregación socioeconómica de la Educación y hace que el sistema público pierda confianza y apoyo social, unos efectos «gravísimos y preocupantes». «La Educación no solo tiene un retorno privado, también tiene retorno social. Se ha demostrado que sociedades con niveles educativos más altos son también sociedades más productivas, menos conflictivas, con menos niveles de criminalidad y con más participación política», ha enfatizado Farré en su alegato en favor de la Educación pública de calidad.
Finalmente, el investigador del Centro de Estudios Demográficos Jordi Bayona ha destacado las diferencias entre los estudiantes de origen extranjero en función de factores como el lugar de nacimiento, el año de llegada o el origen de sus progenitores. En el estudio se aprecia un abandono elevado entre las primeras generaciones, los alumnos que llegan a España con más de 7 años, y las incipientes segundas generaciones, los descendientes de inmigrantes, nacidos en España, mientras que los alumnos hijos de parejas mixtas con un solo progenitor nacido fuera no presentan diferencias con los autóctonos, es más, incluso alcanzan mejores resultados.