Espido Freire: "Publicar un primer libro no sirve de mucho si no hay un segundo, o una voz literaria"

Espido Freire vuelve a Piélagos para enseñar literatura en la Universidad de Cantabria (UC). Este año el curso de verano que imparte está dedicado a la novela, y explora la estructura y los secretos de este tipo de relato. Por eso, todo aquel con interés en conocer cómo se diseña un buena historia tiene una cita con la directora del Máster de Creación Literaria de la Universidad Internacional de Valencia entre el lunes, 28 de junio, y el viernes, 2 de julio, en la Biblioteca Municipal Francisco Llata de Liencres.

No es la primera vez que das un curso de verano sobre literatura en la UC, ¿qué tiene nuestra universidad que te hace repetir?

–La profesionalidad de quienes en ella trabajan, los paisajes en los que los cursos tienen lugar, y unos alumnos que desprenden pasión, curiosidad y entusiasmo. Poco más se puede pedir.

Este año tu curso se centra en la novela. ¿Cuál es la principal enseñanza que quieres transmitirle a sus asistentes?

–Con la novela es complicado hablar de una única enseñanza: trata de reflejar y de abordar el mundo, y por lo tanto, el objetivo es que durante estos días, además de técnica, aprendamos contexto y veamos formatos nuevos.

Una de tus lecciones se titula la ‘trama y sus trampas’, ¿vas a explicarle a tu alumnado cómo haces para que tus historias resulten tan adictivas?

–Bueno, intentaré enseñarles, sobre todo, cómo lo hacen otros. Sería un poco pretencioso centrarlo en mí. La trama es una gran obsesión del escritor novato: y quizás no tengan que centrarse tanto en ella como en otros recursos… de ahí las trampas.

En el monográfico que diriges también intervienen los escritores Carlos Fidalgo  y Fernando Marías. ¿Qué extra aportan estos profesores al curso de verano?

–Carlos es especialista en Periodismo Narrativo, y por lo tanto, el terreno de la autoficción y de cómo la realidad se cuela en la novela estará cubierto. Es además uno de los mejores autores de literatura fantástica de este país, con premios como el Tristana en su haber.  Fernando es, además de novelista, editor, ha escrito novela juvenil y dramaturgia. Para hablarnos de los límites y de las coincidencias de los géneros no se me ocurre nadie mejor.

Como la ganadora más joven del Premio Planeta hasta la fecha, ¿qué consejo darías a las nuevas generaciones de escritores y escritoras que estén intentando publicar su primer libro?

–Publicar un primer libro no sirve de mucho si no hay un segundo, o una voz literaria. En general, tienen empuje, ambición e imaginación, pero les falta formación y expectativas realistas. Hay prisa, lo que para un escritor no es un buen consejero. Les diría que no se fijen en las excepciones y en la precocidad (como yo misma fui) sino en lo que suele ser lo habitual y que marquen no un objetivo sino una carrera.

Eres una escritora con una presencia muy importante en Internet y redes sociales. ¿Cómo crees que estas herramientas pueden ayudar a los creadores de contenidos literarios?

–En general ayudan poco; son formatos diferentes en los que lo que se escribe en la red tiene una mala traducción en un texto. Pero permite el contacto directo con los lectores, obliga a ser versátil y es una magnífica manera de transmitir otro tipo de mensajes no literarios.

Estamos en verano, un momento perfecto para sumergirse en una buena historia. ¿Qué libro nos recomienda Espido Freire que nos llevemos a la playa? 

–Les voy a sugerir mi Diccionario de amores y pesares, en Mueve tu lengua. Es fresco e intenso. Y también la última novela de María Oruña, Lo que la marea esconde. Seguro que va a gustarles.