Castells: “La memorización es una pérdida de tiempo”

La Universidad actual debe asumir un rol investigativo y de defensa y producción de valores y conocimiento, además de adaptarse a los nuevos tiempos y tecnologías y actuar como elemento fundamental en el desarrollo personal del alumnado. Así lo ha explicado Manuel Castells, ministro de Universidades, durante una intervención telemática en la jornada final de la llamada Semana de la Educación organizada por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).

El ministro, que ha comenzado su conferencia haciendo un repaso a las funciones históricas de la institución universitaria, ha afirmado que ésta debe regresar a sus orígenes en cuanto a la producción de valores y el intercambio cultural. En este sentido, ha asegurado que, al igual que antes, los docentes deben volver a ser un ejemplo de conducta y personalidad para los estudiantes, habida cuenta de «la vertiginosa velocidad de cambio en que vive inmersa la sociedad de hoy en día».

Castells ha sido, asimismo, rotundo respecto al sistema de aprendizaje basado en la memorización. «Es una pérdida de tiempo», ha apuntado, añadiendo que «hoy en día el 85% de la información está en internet», por lo que «lo importante ahora es lo que hay detrás de esa información». «Lo que tiene que diferenciar a la universidad de otras escuelas profesionales es el desarrollo del conocimiento básico en las personas. Es más importante conseguir capacidad mental y adquirir un conocimiento que se pueda ir aplicando a distintas tareas», ha afirmado.

El responsable de universidades ha situado la innovación en el centro funcional de la institución como elemento clave para el bienestar de las sociedades y el desarrollo económico. «Pero para que esa innovación tenga sentido tiene que partir de la investigación básica. Sin investigación, no hay innovación», ha remachado.

Por otro lado, el ministro se ha referido también a la universidad pública, afirmando que «debemos ser capaces de agilizar la gestión y hacer que sea tan ágil como privada, adaptándose siempre, eso sí, a las distintas condiciones de empleo a las que está sujetas».

Uno de los últimos asuntos a los que se ha referido Castells han sido las llamadas universidades online o a distancia. Aunque ha destacado su labor formativa, sí que ha advertido del peligro que suponen muchas de ellas, a las que ha calificado como «pseudouniversidades sin ninguna calidad y sin ningún control».

En suma, el ministro de Universidades ha abogado por una institución digitalizada, con más énfasis en la investigación y que no se base en un modelo estrictamente unidireccional sino en un intercambio continuo de conocimientos entre profesor y alumno.