Juegos para no morir en el intento

Jugando el tiempo pasa volando y cada nuevo nivel se convierte en un aliciente para completar el reto y bajo esta premisa desarrolla su trabajo Ouiplay, una empresa navarra que utiliza las estrategias de diseño de los juegos para hacer más atractivos y eficientes procesos laborales, educativos o de salud que en otras circunstancias llegarían a ser tediosos.

Iosu Recalde e Iñaki Huarte son las dos almas mater tras este proyecto que, según cuenta Huarte en una entrevista con Efe, consiste en “utilizar las estrategias de diseño de juegos y aplicarlas en el mundo real” y así hacer “una educación más significativa” y eficiente o conseguir aumentar la adherencia a un tratamiento sanitario.

A través de este método de trabajo, conocido como gamificación, consiguen “convertir rutinas que son aburridas y poco estimulantes en algo que se parezca a un juego” a través de alicientes como medallas, puntos, niveles o retos para así hacer estas tareas más entretenidas y efectivas.

A juicio de Huarte “el juego y el videojuego han estado estigmatizados como algo infantil y banal” y cuando comenzaron con su proyecto en 2014 “nadie sabía de esto”, pero ahora “está reconocido ya que son un buen entorno para desarrollar competencias blandas” y “en los últimos años cada vez más instituciones y empresas apuestan por este tipo de estrategias para llevar el contenido hacia sus clientes y empleados”.

En el ámbito empresarial, ha ejemplificado, esta estrategia puede utilizarse para mejorar la acogida de nuevos empleados, un proceso que habitualmente se realiza mediante la entrega de material escrito con información sobre al compañía que el nuevo trabajador tiene que interiorizar.

“Algo tedioso y que la gente tiene cierta resistencia a hacer lo convertimos en un viaje estimulante y divertido”, señala y apunta que esto se traduce también en un importante ahorro de tiempo para las empresas a la hora de difundir sus marca y valores entre los nuevos empleados para que estos puedan incorporarse cuanto antes a su puesto.

Para Huarte la gamificación tiene también gran utilidad en el ámbito sanitario, pues puede ayudar a aumentar la motivación y adherencia de los pacientes a ciertos tratamientos.

Un ejemplo de esto es el proyecto desarrollado por su compañía junto a la Universidad Pública de Navarra (UPNA) en el área de geriatría del Complejo Hospitalario de Navarra, donde han creado “unos recorridos saludables que ayudan a que estos pacientes, en cuento puedan, desarrollen actividades físicas y cognitivas para mejorar su salida del hospital”.

Y es que según comenta los pacientes de más edad “a nivel cognitivo salen muy deteriorados por las drogas y el encamamiento”, pero a través de este recorrido interactivo consiguen aumentar “de manera considerable” la adherencia y la motivación a la hora de realizar estos ejercicios.

Esta misma dinámica, indica Huarte, puede trasladarse también a la Educación para hacer más atractivos los contenidos a los alumnos y que de esta manera les cueste menos interiorizarlos, un ámbito en el que Ouiplay trabaja con el Departamento de Educación del Gobierno de Navarra y el Ayuntamiento de Pamplona.

Ejemplos de esta tarea son por ejemplo un programa educativo sobre la historia de Pamplona y otro sobre Educación ambiental en el que han convertido “un tablón de información compleja y con conceptos teóricos” en un juego para poder desarrollar en el aula.