Gamificación también en las etapas superiores

En los últimos tiempos, mucho se ha escrito sobre gamificación. La idea última es aprender jugando, algo que en las primeras etapas educativas del niño se lleva a cabo sin entrar en conflicto con el aprendizaje, pero esta práctica se iba haciendo menos frecuente conforme ascendíamos en las etapas del sistema educativo. O, al menos, hasta hace poco. En los últimos años, el uso de determinadas herramientas digitales basadas en la gamificación va extendiéndose a las etapas escolares superiores e incluso a la Educación universitaria. Sus aportaciones a la enseñanza van más allá de la división por edades: capacidad para motivar al alumno y satisfacción de poder conseguir un reto. Los juegos online permiten que el grupo colabore y compita, lo que a su vez genera emociones positivas en los jugadores como la alegría, el asombro, la satisfacción, la creatividad o la curiosidad. La necesidad del jugador de conseguir superar sus expectativas supone un reto de tanto en edades tempranas como adultas.