La Generalitat condena "enérgicamente" los "lamentables hechos" de la Autónoma
El sistema universitario de Cataluña, ha declarado la consellería en un comunicado, «no puede tolerar actos incívicos en sus campus que traspasan de largo los límites aceptables y atentan directamente contra los valores democráticos que rigen en las universidades». Estos hechos en un campus universitario, añade, «infringen las normas de convivencia, de respeto y del más elemental sentido común, poniendo en riesgo la salud de los propios participantes en tiempos de pandemia, y no tienen ninguna justificación posible».
Los desperfectos provocados, la suciedad generada y las molestias ocasionadas al vecindario son, para el Departamento de Universidades, «totalmente injustificables y atentan directamente contra aquellos valores que la universidad quiere fomentar».
Unos 8.000 jóvenes han participado esta pasada madrugada en un macrobotellón convocado a través de las redes sociales en el campus de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), una fiesta no autorizada que se ha saldado con peleas, suciedad, destrozos y una denuncia por violación que investigan los Mossos d’Esquadra. El macrobotellón, que acabó descontrolándose del todo, ha avivado el debate sobre la labor institucional para prevenir y actuar en estas fiestas ilegales multitudinarias durante la pandemia de la Covid-19. La fiesta se convocó en las redes sociales inicialmente como un acto promovido desde la Facultad de Ingeniería.
Cerca de la medianoche, miles de jóvenes se dirigieron en coche al campus universitario, situado en el municipio barcelonés de Cerdanyola del Vallés, junto a importantes nudos de conexión viaria y la autopista AP-7, además de en tren, lo que provocó la saturación de la línea de Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) que conduce a la UAB. La presencia masiva de los jóvenes ocasionó el colapso en las carreteras de acceso al campus y, algunos de ellos, viajaron en el tren cantando, fumando y bebiendo, además de provocar daños en los vagones. Pese a todo, no se han registrado detenciones.
En el campus, algunos jóvenes rompieron mobiliario de la universidad y molestaron a los residentes de las viviendas de la UAB ubicadas en el mismo recinto.