La Tramitología

Se supone que cuando alguien solicita el Ingreso Mínimo Vital es porque las está pasando canutas y quiere una respuesta lo más rápida posible. Le revienta lo que antes se llamaba ‘papeleo’ y que ahora ha encontrado hasta una ciencia: la ‘tramitología’: el arte de tramitar asuntos para resolver problemas. Sólo 300.000 de las 800.000 personas previstas han conseguido superar los trámites para conseguirlo. Es una ciencia compleja, cada vez más complicada.

La razón menos evidente, pero no menos cierta es que el Gobierno, que tiene que conceder ese ingreso, también las está pasando canutas: había prometido ‘pan para todos’ y resulta que no hay pan. Y hay que marear la perdiz aplazando y añadiendo trabas al solicitante, tal vez a la espera de que alguien lo solucione. Esa es la ‘tramitología’ actual, la mayor parte de las veces está consiguiendo generar una nube de expertos en el famoso ‘vuelva usted mañana’, tan frecuente e imposible de quitar de nuestras costumbres más ancestrales.

El que quiera soluciones rápidas que se espere a que lo comprobemos, no vaya a ser que una nube de aprovechados se lleve el dinerito, como tantas veces ha pasado, por ejemplo en Andalucía, sin que le llegue a quien de verdad lo necesita.