Conexión on line familia-escuela
Una mesa redonda celebrada durante el último Encuentro Internacional EducaRed abordó cuestiones como la implicación de las familias o su formación TIC.
Aunque el público objetivo del VI Encuentro Internacional EducaRed fueron los profesores más innovadores de este país, la organización también reservó en su abultada agenda algunos espacios en los que se abordaron temas que apuntan directamente al papel que deben jugar los padres en esta nueva era de aprendizaje digital.
Quizá el momento más reseñable en lo que atañe a los progenitores fue la mesa redonda “Familia y Educación”, que moderó Marián Juste, directora de Programas Educativos en Fundación Telefónica. Cuatro fueron los invitados a participar en la mesa: Luis Carbonel, presidente de Concapa (Confederación Católica de Padres de Familia y Padres de Alumnos); Jesús María Sánchez, presidente de Ceapa (Confederación Española de Padres y Madres de Alumnos); Merce Reig, de la Fundació Escola Cristiana de Catalunya; y Charo Sabada, investigadora de la Universidad de Navarra que colabora activamente con el Foro Generaciones Interactivas.
En sintonía con el espíritu participativo y dinámico que inspiró todo el encuentro, cuenta Marián Juste que “la mesa se desarrolló con una metodología diferente: en lugar de que hablaran los cuatro ponentes y al final hubiera un turno de preguntas para el público, cada pregunta que yo hacía se la formulaba primero a los panelistas y luego al público, de modo que en cada pregunta pudo intervenir cualquier asistente”.
La primera cuestión lanzada por la directora de Programas Educativos de Fundación Telefónica tuvo que ver con la implicación de las familias en la Educación de sus hijos. Y el debate giró en torno a si las éstas deben afrontar esta duda permanente desde una óptica protectora, ayudando en todo lo posible a sus retoños, o más bien adoptar una postura más distante que fomente la independencia del niño a la hora de hacerse cargo de sus quehaceres escolares. “Planteé este dilema: ¿es mejor educar en la responsabilidad y autonomía y que el niño sea el que haga sus propios deberes, o más bien en la supervisión y el acompañamiento continuo. La conclusión a la que llegamos es que el ideal pasa por utilizar ambas estrategias de manera conjunta”.
También se habló largo y tendido sobre hasta qué punto han de involucrarse las familias en el funcionamiento y organización del centro al que acuden sus hijos. Por una parte, quedó constancia de que las nuevas tecnologías han permitido agilizar las relaciones familia-escuela. “Todos coincidieron en que las TIC permiten implicarse mucho más en el día a día escolar, ya que ahora resulta posible establecer redes entre padres, entre padres y profesores, enviar notas on line… Está claro que en la actualidad la comunicación es mucho más fluida”, señala Juste. Por otra, hubo consenso en cuanto a los límites de dicha implicación, la cual, según la opinión mayoritaria, no debería adentrarse en el diseño del proyecto pedagógico, una cuestión que debería competer sólo al centro.
En cuanto al papel de las ampas, el publico y los panelistas convinieron en que en la actualidad éstas pueden galvanizar sus actividades sirviéndose de herramientas digitales. No en vano, cada vez son más las asociaciones de padres y madres que crean páginas web, blogs, etc, con el fin (entre otros) de facilitar el acceso a información de todas las familias con hijos escolarizados en un centro concreto.
Un último tema abordado en la mesa redonda fueron los riesgos para los menores de la navegación internauta. Según Juste, “quedó claro que las familias no pueden quedar ajenas a esto, que deben de formarse para que puedan orientar a sus hijos en el uso seguro de internet y participación en las redes sociales, y también para que puedan ayudarles en su proceso de aprendizaje”. También preguntó Juste sobre si se debe restringir o promover el uso de las TIC entre los menores. Sólo una persona se mostró a favor de limitar su acceso; el resto apostó por fomentar un uso responsable, ya que sus ventajas ganan por goleada a sus posibles inconvenientes.