Problemas de fertilidad: una preocupación con tradición.
Uno de los problemas a los que se enfrenta el hombre es su propia dificultad para concebir: una pareja joven y sana tiene cada mes tan sólo un 25% de posibilidades de lograr un embarazo viable. Si el hombre o la mujer tiene problema de fertilidad, este porcentaje disminuiría considerablemente.
Al contrario de lo que se suele creer, los problemas de fertilidad no son un problema nuevo, surgido a través de las consecuencias del desarrollo: la polución ambiental, la calidad de los alimentos (comida basura, agricultura transgénica) y las desventajas de algunos avances tecnológicos (las ondas magnéticas en los teléfonos móviles, por ejemplo) los cuales interfieren en la fertilidad de manera negativa. Nuestros antepasados también se enfrentaron a problemas a la hora de concebir: numerosas estatuas de Dioses para el culto a la fertilidad nos revelan que la preocupación del hombre por la posibilidad de no poder tener hijos existe desde hace más tiempo del que pensamos.
Antiguamente no existía polución ambiental, ni productos transgénicos, ni aparatos modernos que supuestamente perjudican la fertilidad; por lo que los problemas para concebir a los que se enfrentaron nuestros antepasados estaban basados en gran parte a la falta de conocimiento del proceso reproductivo y del aparato reproductor. Cuando una mujer no se quedaba embaraza se la calificaba de „estéril“ y se la despreciaba, a nadie se le ocurría pensar que pudiera ser el hombre, el que no era capaz de engendrar.
A través de los estudios actuales, hoy en día sabemos que un tercio de los problemas de fertilidad de una pareja son por factor masculino: poca o mala cantidad de espermatozoides. El otro tercio es por factor femenino: entre los problemas de fertilidad más comunes en la mujer cabe destacar: la endometriosis, el síndrome de ovarios poliquísticos, la hiperprolactinemia, los problemas con la tiroides y la edad. El último tercio está constituido por problemas en ambos miembros.
Si a los mencionados problemas de fertilidad sumamos además una falta de información, disminuirán aún más las posibilidades de concebir: Saber cómo funciona el aparato reproductor y cómo tiene lugar la concepción ayuda a mejorar las posibilidades de lograr el embarazo.
En Proyecto-Bebe, www.proyecto-bebe.com, una plataforma de internet en la que colaboran profesionales internacionales de varias ramas de la medicina clásica y tradicional, encontrarás información sobre el proceso reproductivo y los problemas de fertilidad en general , así como sobre cómo aumentar la fertilidad de forma natural en particular… Especialmente son interesantes las gráficas de temperatura basal, a través de las cuales, la mujer puede llevar un control de su ciclo menstrual y detectar los días fértiles y posibles irregularidades hormonales (por ejemplo una fase lútea corta o insuficiente).
Para evitar los errores de nuestros antepasados y no caer en la “ignorancia reproductiva“ es esencial informarse y consultar todas las dudas con el médico, de esta manera será posible localizar y solucionar cuanto antes un posible problema de fertilidad.