¿Qué hacer con los deberes? con una hora al día basta
El debate sobre deberes sí o no es recurrente. En España se dedican muchas horas a las tareas en casa, pero reducirlas no es lo mismo que quitarlos.
Una hora al día de deberes es suficiente para que los alumnos refuercen los conocimientos adquiridos en clase y puedan obtener mejores notas. Esta es una de las principales conclusiones a las que ha llegado un equipo de investigadores de la Universidad de Oviedo tras analizar 7.725 cuestionarios realizados a todos los estudiantes de 13 y 14 años del Principado de Asturias, que se encontraban en 2º de ESO durante el curso 2010-11. El trabajo, que ha sido publicado en la revista científica Journal of Education Psychology, es una de las mayores investigaciones que se han llevado a cabo en nuestro país sobre los efectos que produce hacer las tareas escolares en casa. Analizar la relación que existe entre realizar deberes y el rendimiento académico es el objetivo que persigue este estudio y sus investigadores han comprobado que no es una relación lineal, sino una curva. “Es entre los 90 y 100 minutos de realizar las tareas escolares cuando el rendimiento de los alumnos comienza a bajar. El momento más eficiente es entre 60 y 70 minutos” indica Javier Suárez-Álvarez, uno de los coautores de este estudio.
Seis horas semanales
Y es que si tiramos del estudio más reciente de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) tomando como referencia los datos del último Informe Pisa, nuestros escolares realizan 6,5 horas de tarea a la semana frente a una media de 4,9 horas. Así, España es el quinto país que más deberes pone en una lista de 38 naciones, sólo en Polonia (6,6 horas), Irlanda (7,3), Italia (8,7) y Rusia (9,7) tienen más deberes que en nuestro país. En cambio, los que presentan menos horas son Finlandia (2,8) y Corea del Sur (2,9), dos de los países con mejores resultados académicos en Pisa. Y, ¿qué dicen los expertos? Sonia García, secretaria de comunicación del sindicato de profesores (ANPE) considera que: “los deberes deben ser proporcionados a la edad y el nivel educativo, ya que una carga excesiva lleva a la frustración y desmotivación del alumno. Debe haber una coordinación entre los profesores de forma que los alumnos de un mismo grupo no acumulen hojas y hojas de tareas.”
Para Jesús Salido Navarro, presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA): “No somos partidarios de los deberes tal y como están concebidos, porque se han convertido en una prolongación de la jornada escolar. Además, los padres no siempre tienen capacidad o tiempo para ayudar a sus hijos y se ven obligados a enviarlos a academias o ponerles un profesor particular. Quien tiene dinero para hacerlo es el que sale adelante”.
Cinco errores que cometen los padres con los deberes
–Hacerlos nosotros. Realizar las tareas escolares de los hijos ni aumenta su capacidad de trabajo ni su disciplina, ni les hace aprender nada nuevo. Cuidado.
– Hacer los deberes en cualquier sitio. En la cocina mientras se prepara la cena o en el cuarto de estar mientras los otros hijos ven la tele. Hay que procurar tener un lugar fijo, su propio rincón de estudio, donde reine el silencio y sin distracciones.
–No entender el objetivo que persiguen los deberes. Los deberes escolares son refuerzos para el aprendizaje y son una ocasión para que los alumnos aprendan a trabajar de manera autónoma. Los padres pueden explicarles las dudas, pero es preferible ayudarles a encontrar la respuesta que buscan: en sus propios libros de texto o en internet.
–Convertir el momento de los deberes en una discusión diaria. Las tareas escolares deben realizase en un tiempo de tranquilidad. Si el alumno tiene problemas debe consultarlas con sus profesores al día siguiente. Es muy perjudicial crear momentos de tensión y ansiedad con los hijos por los deberes
–No entender que los hijos necesitan nuestra presencia y apoyo. Cuando los hijos son sobre todo pequeños lo de encerrarse en la habitación solos a hacer deberes, sueles costarles y mucho. Para que aprendan a crear el hábito de hacer sus tareas, es aconsejable estar con ellos, sobre todo al principio, prestándoles atención, motivándoles y resolviendo sus dudas.