La gala de inauguración presidida por los reyes marca el inicio del V Centenario de Antonio de Nebrija

“Antonio de Nebrija fue un hombre cuyo afán de conocimiento no tuvo límites”. Con estas palabras clausuraba el rey Felipe VI la gala de inauguración del V Centenario Antonio de Nebrija que tuvo lugar el pasado lunes en el Teatro Real de Madrid. “Esta gala marca el inicio de un año donde se va a conmemorar el trabajo de alguien esencial en la configuración de nuestra lengua”.

Además puntualizó que muchos valores que predicó el humanista, como la defensa de la libertad, de pensamiento y de expresión, siguen vigentes hoy en día.

Con la llegada de los reyes al Teatro Real comenzó el acto conducido por la periodista de TVE, Elena S. Sánchez, y un minuto de silencio por las víctimas del naufragio del pesquero Villa de Pitanxo, en aguas de Terranova. Mientras Sánchez narraba detalles de la vida de Nebrija, diferentes artistas y personalidades pasaron por el escenario para poner en valor su figura.

El primero fue Dorantes y su piano, ilustre lebrijano y miembro de una dinastía de músicos flamencos, quién interpretó la Sintonía Elio Antonio de Nebrija, una composición propia encarga por el Ayuntamiento de Lebrija y cedida gratuitamente a la Comisión del V Centenario que sobrecogió al público.

Tras una proyección en la que varias figuras vinculadas a la universidad, la Biblioteca Nacional o biógrafos y lingüistas relacionados directamente con el humanista contaban más rasgos de su personalidad y de su obra, fue el turno de José Muñiz, presidente de la Comisión Interadministrativa del V Centenario del fallecimiento de Antonio de Nebrija y rector de la Universidad Nebrija.

“Fue un brillante profesor e investigador y representa a la perfección los valores universitarios”, apuntó Muñiz. “Todos somos responsables del inmenso tesoro que es nuestra lengua”, aseguró.

Continuó la música con Haze, músico urbano, filólogo, profesor de Lengua y Literatura en el IES “San José de Coria del Río”, quién se declara un apasionado de la figura de Nebrija y quien se convirtió, según recalcó él mismo tras su actuación, en “el primer rapero en pisar las tablas del Teatro Real”.

Las proyecciones siguieron apareciendo a modo de interludios entre las intervenciones. Tras otra de ellas, fue Darío Villanueva, presidente del Patronato de la Universidad Nebrija y miembro de la Real Academia Española, el siguiente en subirse al escenario.

Villanueva votó porque en el V Centenario se reconozca que con la Gramática castellana de 1492, Antonio de Nebrija “no fue el ideólogo de la lengua del Imperio, sino el patriarca del imperio de las lenguas en el Nuevo Mundo”.

Eliseo Parra, músico, divulgador y renovador de la música tradicional española, embelesó a los asistentes cantando a capela una versión sefardí del Romance del Príncipe Don Juan, la cual acompañó con otra pieza del siglo XV, las cuales pudo escuchar Nebrija. Finalizó las actuaciones musicales Rozalén, quien además de cantante ha sido Premio Nacional de las Músicas Actuales 2021.

Antes de que el rey clausurara la gala, el ministro de Cultura y Deportes, Miquel Iceta, aseguró que “merece la pena que celebremos a nuestros grandes y a nuestros sabios. Antonio de Nebrija fue un hombre de mil saberes y constituyen el corazón de los actos previstos este año”. “Quien ama su lengua las ama a todas y esto también es un legado de Nebrija que celebrar en este país plurilingüe”, añadió.

Por último, el rey puso en valor las actividades programadas para el V Centenario de Nebrija, las cuales “nos ayudarán como sociedad a defender y difundir el amor por el conocimiento, la pasión por la ciencia, y la fidelidad de los principios y el respeto por los seres humanos por encima de cualquier diferencia, ya sea de lengua, origen, creencia, raza u orientación”.