Escuelas Católicas de Madrid insta al Gobierno a una despolitización de los contenidos de la Lomloe
Manuel de Castro (segundo por la izq.) se dirige a los asistentes a la Asamblea de Directores y Titulares de centros católicos.
Durante su discurso inaugural en la III Asamblea, Manuel de Castro, presidente de Escuelas Católicas de Madrid, también ha requerido el consenso ético, social y científico imprescindible “para no imponer conceptos y posicionamientos de marcado sesgo ideológico”.
La última Asamblea del curso 2021-22, celebrada por primera vez de manera presencial después de años, se ha despedido de los cerca de sus 400 directivos con el reto de afrontar una nueva ley de Educación, a pesar de la solicitud de aplazamiento que reiteradamente ha pedido la comunidad educativa. Una ley que trae consigo la incertidumbre y la politización de los contenidos, especialmente en las humanidades, y que, en consecuencia, “juega con el futuro de nuestros jóvenes, y con ello, con el futuro de nuestras regiones y de nuestro país”.
Asimismo, De Castro ha querido insistir en la necesidad de continuar aspirando a la extensión del concierto educativo a otras etapas no obligatorias, como son la Formación Profesional de Grado Superior y el Bachillerato, máxime cuando van creciendo los “cheques escolares” que suponen, “desde nuestro punto de vista, una fórmula incompleta, ya que no garantizan la estabilidad y la gratuidad, e impiden, por tanto, una verdadera libertad de elección”.
De Castro ha querido insistir en la necesidad de continuar aspirando a la extensión del concierto educativo a otras etapas no obligatorias, como son la Formación Profesional de Grado Superior y el Bachillerato
Por último, el presidente ha agradecido el ofrecimiento de los nuevos directores elegidos como representantes en la Junta Rectora de ECM, que se renueva cada cuatro años en esta Asamblea: “Formar parte de la Junta es un verdadero acto de solidaridad y de colaboración institucional en la defensa de nuestras escuelas católicas”.
Durante dos horas, se trataron además otros temas administrativos, jurídicos y formativos de interés para los directivos de los 340 colegios que conforman la red de Escuelas Católicas de Madrid, entre los que cabe destacar las indicaciones para la propia implantación de la Lomloe, que ha ocupado una gran parte del espacio de la Asamblea; las informaciones acerca de la reforma laboral; y la formación prevista por los distintos Programas de ECM de cara al curso que viene.
En definitiva, una Asamblea «marcada por la preocupación respecto a la implantación de la Lomloe y la incertidumbre por la autonomía pedagógica, pero con la alegría del reencuentro y la esperanza y ánimo por seguir desarrollando una enseñanza basada en la libertad, equidad y en los valores propios de nuestra escuela», según informa la organización en un comunicado.