Los alumnos testan la nueva selectividad: "aplicar conceptos a la vida real"
El alumnado de 1º Bachillerato del IES "Rosario de Acuña" de Gijón, se ha enfrentado a la prueba piloto de la nueva selectividad.
Estudiantes de 1º de Bachillerato de Cataluña, Asturias, Cantabria, La Rioja, Comunitat Valenciana, Castilla-La Mancha, Canarias, Navarra, Extremadura, Baleares y de Ceuta y Melilla –todas menos las gobernadas por el PP y País Vasco y Aragón– han sido sometidos a un ensayo que ha constado de dos ejercicios: uno de una materia común y otro de la materia obligatoria de la modalidad que están cursando, pruebas con una duración de 105 minutos cada una, frente a los 90 actuales.
En Asturias –con 150 participantes en total–, el IES «Calderón de la Barca» de Gijón ha sido uno de los centros seleccionados para «probar» una selectividad «bastante innovadora» en la que se aplican «los conceptos a la vida real», en opinión de Rosa Díaz, de 16 años, una de las estudiantes que se han sometido al piloto. «Me parece bastante bien la prueba. Diferente, pero bien. Muchas veces, al hacer ejercicios nos preguntamos para qué vamos a aplicarlos, y aquí se ve más aplicado y no como conceptos sin sentido», ha dicho a los periodistas tras concluir el ensayo que en Asturias ha versado sobre Matemáticas y Filosofía.
La estudiante ve «razonable» el nivel de dificultad de los exámenes, que, en el caso de filosofía, ha incluido análisis a partir de textos y también de imágenes en cada uno de los bloques a elegir. En Matemáticas, los jóvenes se han enfrentado a cuestiones vinculadas al circuito Ricardo Tormo de Cheste o la estrella mudéjar, así como preguntas relacionadas con una empresa que alquila en la playa hamacas y sombrillas. También han tenido que responder a un cuestionario con preguntas sobre su situación personal y familiar y un test para valorar el ensayo.
«La prueba del circuito ha sido la más entretenida», ha señalado, por su parte, Pablo Verdasco, de 17 años, quien ha considerado un «buen punto» que los ejercicios propuestos se puedan «aplicar a la vida cotidiana». El joven ha destacado que «a la mayoría» de los compañeros les ha sobrado, incluso, entre cinco y diez minutos de los 105 establecidos para cada examen.
Más tiempo para reflexionar
La jefa de área del Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEE), Ruth Martín, ha estado presente en el instituto gijonés durante unos exámenes que «ponen al alumnado frente a situaciones de la vida real», con el propósito de «aplicar las competencias» y no hacer «simplemente una prueba memorística». Ha explicado que la ampliación del tiempo en 15 minutos en el ensayo se debe a que los estudiantes tendrán que «reflexionar» entre todas las opciones a elegir en las diferentes materias y que, en el caso de inglés, incluye como novedad una prueba de «listening». Según ha señalado, el Ministerio de Educación prevé disponer en junio de los «modelos que todas las materias» que van a entrar en la prueba de acceso de 2024.
El director del instituto gijonés, Luis Fernández, ha valorado los cambios introducidos en una prueba de Filosofía «bonita e interesante» y en la de Matemáticas, donde ha habido «un cambio grande» respecto a la selectividad de años anteriores, al tiempo que ha recordado que los alumnos examinados no estaban prevenidos de que este martes iban a someterse a este ensayo.
Por su parte, la consejera de Educación, Lidia Espina, ha recalcado la importancia de este pilotaje, que permitirá valorar las «fortalezas» y «debilidades» de la nueva selectividad para «aprender y reconducir lo que sea necesario».
Arrancará en 2024
En el ensayo se analiza el grado de adaptación de los estudiantes a este tipo de prueba competencial, el tiempo establecido para los ejercicios y la fiabilidad de la corrección, entre otras cosas. Su posterior análisis permitirá tomar decisiones basadas en evidencias en cuanto al modelo de prueba definitivo de cada materia que se hará en 2º de Bachillerato a partir de 2024, y modificar, en su caso, los aspectos que se determinen.
Las pruebas serán corregidas por docentes universitarios especialistas en las materias evaluadas y de ESO y van acompañadas de unos cuestionarios y entrevistas personales, orientados a conocer la opinión del alumnado sobre su estructura, contenido y características técnicas.
En el piloto no ha habido examen de Historia de España, dado que esta asignatura se imparte en 2º de Bachillerato y la prueba de acceso para ese alumnado será idéntica a la del curso pasado.