Juegos divertidos para facilitar tus clases de Matemáticas a alumnos/as de todos los niveles

Tus alumnos de Matemáticas necesitan un nuevo enfoque para consolidar lo aprendido y, sobre todo, para despertar su curiosidad. La clave está en que sientan necesidad de aprender para superar los retos que estos juegos les supondrán. ¡Manos a la obra con estas alucinantes dinámicas!

Estos dos juegos están pensados con el fin resultar entretenidos y amenos para los más pequeños en el aula de Matemáticas.

Ordenar números según colores

Para el primer curso de Infantil, pueden empezar con esta propuesta de razonamiento lógico. La idea es que comprendan cómo se ordenan los primeros números al relacionarlos con un concepto muy familiar, como los colores del arcoíris. Puedes hacerlo de esta manera:

1. Imprime los números del 1 al 20, siempre partiendo del rojo en el menor hasta llegar al violeta en el mayor.
2. Pídeles que los ordenen atendiendo tanto a los números como a las tonalidades.
3. Cuando lo hayan conseguido, complícalo con versiones en blanco y negro de las mismas cifras.
4. Para que les resulte más desafiante, vuelve a hacerlo, pero con colores salteados (que no sigan ningún orden).

Crear un problema matemático simple

Este segundo juego está pensado como paso previo a la Educación Primaria, es decir, al final de Infantil. Demuéstrales que ellos mismos tienen la posibilidad de formular sus propios problemas. Pero lo plantearemos de manera distinta a la dinámica que vimos antes: en lugar de darles la solución, solo ellos la sabrán.

Con lo anterior, se pretende que sus compañeros traten de resolverlo y les hagan propuestas. El estudiante que lo ha elaborado será quien responderá si son o no correctas. Gana quien primero adivine la cifra exacta, y es importante que tú hagas de moderador. De hecho, es prioritario que compruebes que el problema realmente está bien hecho.

Las ideas que tenemos para Educación Secundaria están basadas en la creatividad y el aprendizaje autónomo.

Crear un problema para la solución

Esta primera opción es ideal si quieres fomentar la resolución de conceptos. Procura transmitir la idea de que no hay un solo problema, sino que tienen la capacidad de inventar varios que sean válidos:

• El primer paso es presentarles un número no muy complejo, por ejemplo, un de tres cifras.
• Después, cada uno tendrá que crear un problema matemático que tenga esa cifra como resultado.
• Como alternativa, o cuando decidas aumentar la dificultad, siempre puedes hacer que trabajen en grupo.

Plantea una paradoja

Otra actividad puede ser invitarles a que exploren las paradojas más conocidas. Cada uno de los alumnos de Matemáticas tendrá que escoger una y presentarla en clase, habiendo investigado primero. Lo más probable es que, si no tiene una solución conocida, tampoco se encuentre en ese momento, pero pueden lanzar propuestas.

Sería conveniente también que la presenten en la pizarra, de modo que sean ellos quienes tomen las riendas de la explicación. Sus compañeros pueden abordar este reto planteando soluciones. Como docente, es importante que intervengas para mostrarles por qué no son correctas y, sobre todo, para que comprendan la naturaleza de las paradojas.

Para esta última etapa, tenemos dos propuestas basadas en la geometría y los números primos, respectivamente.

Calcular el área de una figura compleja

Esta tercera actividad es estupenda para que continúen entendiendo la geometría cuando esta empieza a complicarse. Lo mejor de todo es que tengan la opción de hacerlo en equipo, con lo que estarás fomentando el aprendizaje colaborativo. Nuestro consejo es que partas de un polígono irregular, dado que se puede descomponer en figuras simples.

1. Deben trabajar en grupo (preferentemente, de tres a cinco personas) para dividir la figura.
2. Cada miembro tiene que calcular el área de la que le ha tocado.
3. Para determinarla por completo, invítales a sumar el resultado que ha obtenido cada uno.

Inventario de números primos

Queremos incluir también una actividad que estimule el pensamiento rápido y el cálculo mental. Los números primos suelen ser complejos de entender para los jóvenes, y existen múltiples técnicas de estudio para ello. Una ideal está basada en un juego que es válido para todos los niveles, igual que los que hemos visto hasta ahora.

1. Explícales (o repasa) las propiedades de los números primos y sus características.
2. Pídeles que elaboren un inventario con todos los que conozcan.
3. Con el objetivo de que tenga mayor complejidad, diles que lo hagan en orden de menor a mayor.
4. Dales tres minutos para que confeccionen su listado en plena concentración.

Después de haber conocido estos juegos, esperamos que sepas mejor cómo orientar tus clases de Matemáticas. Tus lecciones pueden convertirse en auténticos momentos de diversión, con independencia del curso educativo. ¿Hay otros recursos entretenidos que te gusten para tu aula? ¡Compártelos con todos en los comentarios!