Automoción, emergencias, ciberseguridad… Estos son los grados de FP más valorados por las empresas

Septiembre supone el comienzo de una nueva etapa para muchos. Los estudiantes hasta los 18 años se enfrentan a una nueva vuelta al cole, la “más cara de la historia”. Los mayores de edad, al ingreso en la universidad o el comienzo de un grado de Formación Profesional.

Si bien los datos del Observatorio de la Formación Profesional de 2022 señalan que más de 92.000 oportunidades de empleo se quedarán sin cubrir en los próximos años por la falta de titulados de FP, se espera que una cuarta parte de las oportunidades de empleo en España estén reservadas a estos graduados. Según los últimos estudios del SEPE, la tasa de empleo para estos estudiantes es del 42,2%, lo que supera la de los graduados universitarios, situada en un 38,5%.

“En España hemos rebasado el millón de matrículas de FP. Se trata del único tramo educativo que crece, a pesar de la disminución demográfica. Es decir, más gente opta por esta vía para mejorar su futuro educativo, personal y profesional”, afirma Luis García Domínguez, presidente de la Asociación de Centros de Formación Profesional FPEmpresa.

Dentro de esta opción educativa, ¿cuáles son los títulos más valorados hoy en día? Un ranking de Universae España los desvela.

1. Grados en Automoción: esta industria es uno de los principales motores económicos del país: hay nueve multinacionales con 17 plantas que produjeron 2.1 millones de vehículos en 2021. Esto supuso el 10% del PIB español y el 9% del empleo de la población activa, con más de 1,9 millones de empleos. Este sector, de hecho, es uno de los más atractivos para trabajar según el informe anual Randstad Employer Brand Research 2022.
2. FP de Emergencias y Protección Civil.
3. Desarrolladores de apps. Según un informe de Infojobs, en los últimos cinco años la búsqueda de programadores de apps móviles se ha multiplicado por 17. Dentro de este ámbito, las especialidades que más se valoran son Front End, Back End y Full Stack.
4. Expertos en Ciberseguridad. A la par que ha evolucionado la tecnología, también lo ha hecho la ciberdelincuencia: el Instituto Nacional de Ciberseguridad gestionó en 2022 más de 109.000 incidentes. Esto ha convertido en una necesidad la formación en esta materia y la incorporación a las empresas de profesionales especializados en este ámbito.

De hecho, la Comisión Europea estima que en los próximos años van a ser necesarios en Europa 168.000 expertos en ciberseguridad. Según el Consorcio de Certificación de Seguridad de Sistemas de Información lanzado en 2021, este déficit se cifra en 30.000 trabajadores en el caso de España.

Además, el informe Radiografía de Empleos Emergentes en España de DigitalEs muestra que la demanda de este tipo de perfiles se ha disparado en un 508% entre 2019 y 2022. La demanda de puestos como el de arquitecto de ciberseguridad o ingeniero de seguridad informática ha crecido en más de un 300%.

Hamed Wahdat Ahmadzada, director de Universae en Madrid, explica el creciente interés en estos ámbitos: “La constante evolución tecnológica ha aumentado la necesidad de expertos en Automoción y Desarrollo de Aplicaciones para crear soluciones innovadoras. En el ámbito de Protección Civil y Emergencias, situaciones de crisis como la que se está viviendo en Tenerife requieren de respuestas eficientes, lo que hace que la formación sea esencial”.

“Por otro lado”, apunta Wahdat, “la transformación digital ha generado una mayor necesidad de desarrolladores de aplicaciones, ya que las empresas buscan mejorar su presencia en línea y ofrecer experiencias más interactivas a los usuarios. Y los conocimientos en ciberseguridad son cruciales por el aumento de amenazas cibernéticas en un mundo cada vez más conectado. Las organizaciones necesitan proteger su información y sistemas, lo que ha generado gran demanda de profesionales capaces de salvaguardar la seguridad digital”.

Wahdat valora el “aumento en la inversión y la promoción de la FP” que se está haciendo en España, lo que, dice, “implica el reconocimiento de su importancia en la formación de profesionales altamente capacitados, en sintonía con las demandas del mercado laboral actual”. Esta modalidad educativa “se ajusta de manera perfecta a la realidad del mercado laboral y se caracteriza por su enfoque en habilidades prácticas y aplicables al mismo”, subraya.

Según el director de Universae en Madrid, en los últimos años se han diversificado y adaptado los programas educativos a las necesidades de la industria y la tecnología. Esto ha hecho que la percepción de esta opción educativa haya “evolucionado muy positivamente, hasta el punto de ser cada vez más valorada tanto por los estudiantes como por las familias”. “Estamos seguros de que este impulso continuará fortaleciendo la conexión entre la educación y el empleo, contribuyendo al crecimiento económico y al desarrollo sostenible en España”, declara.

De la misma opinión es García Domínguez, quien tilda de “necesario” el esfuerzo que se ha hecho por la FP en España en los últimos cinco años. Ahora que, considera, “las empresas y la sociedad saben que los titulados de FP son un elemento clave para un sistema social y económico más desarrollado y las familias ven con otros ojos la elección de sus hijos por esta vía educativa en vez de la tradicional”, apuesta por dar una “oferta suficiente y gratuita en todos los territorios”. “Estos últimos años nos hemos encontrado un gran número de solicitantes de plazas tanto en grado medio como en grado superior que no encuentran plazas públicas. Si no cubrimos las expectativas perderemos este gran impulso”, advierte.

El presidente de FPEmpresa defiende que la FP “es la formación que mejor se adapta a las necesidades reales del mercado por su flexibilidad y relación directa con la realidad productiva”. La nueva ley, expone, permitirá encontrar “una oferta más amplia de formaciones cortas y de los másteres o cursos de especialización que permitirán abordar las nuevas demandas de los sectores productivos”.

“La FP tiene un acceso rápido al mercado y permite ir tan lejos como cada uno necesite. Además, no es incompatible con una formación universitaria. Apostamos por vías que permitan a los ciudadanos transitar y cruzar de un sitio a otro”, concluye.