CCOO urge a mejorar el proceso de las oposiciones educativas realizadas en Aragón
Los candidatos tuvieron que soportar las altas temperaturas durante el mes de julio, sobre todo en Zaragoza capital.
El sindicato CCOO Enseñanza Aragón ha denunciado este miércoles los problemas surgidos durante el proceso de oposiciones docentes celebradas en Aragón, como los criterios establecidos por los tribunales calificadores o las altas temperaturas durante la realización de la segunda parte de las mismas, sobre todo en Zaragoza capital, que insta a las autoridades educativas y a la administración competente a mejorar de manera urgente.
En un comunicado el sindicato ha recordado que aunque los criterios establecidos por los tribunales calificadores han sido publicados tras la realización de las pruebas, muchos de ellos son demasiado generales y no proporcionan una orientación clara sobre los aspectos a evaluar, además de que algunos tribunales sí han detallado más los criterios, lo que ha generado una falta de equidad entre los opositores a la hora de ejercer el recurso de alzada para justificar si han cumplido con lo establecido.
Por ello, CCOO Enseñanza Aragón solicita que en futuras convocatorias se establezcan criterios más concretos y se utilicen rúbricas más detalladas, garantizando así la igualdad de oportunidades para todos los participantes.
En cuanto a las temperaturas, el sindicato ha reclamado que se busquen edificios públicos con aire acondicionado o que se acondicionen las aulas de los centros educativos para proporcionar condiciones adecuadas a los aspirantes durante el desarrollo de las pruebas.
El sindicato recuerda que también han recibido numerosas quejas en relación a algunos de los alojamientos facilitados a los miembros de los tribunales calificadores, que deben cumplir con los estándares de calidad necesarios para asegurar un entorno adecuado para que no afecte a su desempeño y juicio imparcial. Así, ha habido tribunales de determinadas especialidades en residencias estudiantiles que no garantizaban su tranquilidad e intimidad, ni la correcta custodia de sus pertenencias.
CCOO ha destacado además que los miembros de los tribunales no reciben remuneración por el tiempo extra invertido en el proceso de corrección y que las horas asignadas no son suficientes para cumplir con los plazos de corrección exigidos, lo que genera una carga de trabajo adicional y afecta la calidad de la evaluación. Exige por ello que se reconozca y se compense adecuadamente el tiempo adicional invertido por los miembros de los tribunales, garantizando así la integridad y calidad del proceso de oposiciones.
El sindicato insta a las autoridades educativas y a la administración competente a abordar estos problemas de manera urgente y a trabajar en conjunto con los sindicatos y los profesionales de la Educación para mejorar el proceso de oposiciones docentes en Aragón.
En Aragón se han celebrado dos sistemas de oposición a la vez: por estabilización (no eliminatorias) y por reposición (eliminatorias). En el segundo caso, para Física y Química y Latín, se ofrecían 23 y 21 plazas, y han quedado libres 12 plazas, seis en cada una de las especialidades, esto es, un 30% de las plazas han quedado libres por turno de reposición. En cambio, por estabilización, se ofrecían 388 y se han cubierto 385, quedando solo libres las de turno de discapacidad, que se dejan para la siguiente convocatoria también por turno de discapacidad.
«Las 385 plazas se han ocupado sin problema, y más personas han superado las pruebas que plazas ha habido. Nosotros tenemos claro que un proceso de oposición bien organizado con pruebas no eliminatorias favorece que las plazas se ocupen. Es lamentable que tras celebrar unas oposiciones queden plazas sin cubrir, y lo ideal es que todo el mundo pueda demostrar su capacidad, sus aptitudes pedagógicas, no solo su conocimiento teórico, sino cómo se traslada este conocimiento al aula», plantea Andrés Mingueza, secretario de Organización de la Federación de Educación de CCOO Aragón.
Por último, Mingueza plantea la necesaria revisión de los temarios obsoletos, estatales, y, si se llegan a actualizar, la publicación de epígrafes que acompañen al título y sirvan para guiar al opositor.