Dos sindicatos canarios reclaman recuperar el teletrabajo docente en las reuniones

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), junto a la Unión Sindical de Profesores de Secundaria (USPS), han solicitado al consejero de Educación de Canarias, Poli Suárez, recuperar el teletrabajo docente en las reuniones de organización como ocurrió por la pandemia de Covid-19.

Así lo han manifestado en un comunicado a un día de dar comienzo el curso escolar en las islas, al considerar «inadmisible» que la administración responsable no reconduzca el modelo de teletrabajo en los colegios públicos, no implantado tampoco en la anterior legislatura.

«La anterior administración educativa castigó a los docentes de toda Canarias imponiendo la presencialidad obligatoria en todas las reuniones de coordinación, que no implican la docencia directa, sin justificación alguna, tras años de trabajo telemático, y que ha supuesto un avance digital en la calidad de la enseñanza educativa», han ahondado.

Conforme han indicado los miembros sindicales, esta situación «ha generado un clima de enfado y crispación entre el profesorado durante el último curso», que estiman continuará así con la implantación apresurada de la Lomloe.

Los sindicatos han denunciado también «que se están realizando muchas actividades de teletrabajo sin garantizar las condiciones de trabajo y de uso de las nuevas tecnologías», razón por la que han solicitado también «a la mayor brevedad» la negociación para la regularización del trabajo telemático tras no obtener respuesta en las tres ocasiones que lo han reclamado.

A juicio de CSIF Educación Canarias y USPS, es incomprensible la implantación de la modalidad de trabajo «cuando la propia administración educativa anterior, y la actual, potencian el teletrabajo en los servicios centrales» o que su recuperación no conlleva «ningún coste económico».

Por ello, los dos sindicatos han pedido a Educación equiparar sus derechos y condiciones laborales a las de los trabajadores de otras administraciones y del sector privado, a fin de «responder de manera eficiente» a cualquier alteración en la actividad educativa habitual, facilitar la conciliación de la vida familiar, así como disminuir la carga de burocracia que sufre el profesorado, concluyen en la nota.