Escuadra y cartabón, ¿cómo enseñar a usarlos?
Estas dos herramientas son perfectas para que aprendan a dibujar desde que tienen cuatro o cinco años, no antes. La razón es que no sería factible que comprendieran antes su funcionamiento, pero sí en esta edad. ¿Qué buscamos con ello? Hay ciertas ventajas que resaltan la importancia de su uso:
- Potencia la precisión y mejora la técnica. Hace que organicen mejor sus dibujos y trazos para desarrollar sus habilidades de percepción espacial.
- Aprenden instrumentos básicos de la geometría. Es idóneo para que se familiaricen con conceptos esenciales, como son los ángulos, las líneas y las formas.
- Estimula sus habilidades matemáticas. Les ayuda con la adquisición de procesos como las mediciones y, especialmente, la simetría.
Por otra parte, también les enseña de modo gráfico qué son las líneas paralelas y cómo se hacen. Es un buen recurso para cuando tengan que elaborar sus fichas de diseño y los cajetines, así como los márgenes y sangrías de los folios.
Después de ver el impacto que pueden tener estos recursos, comentaremos tres recomendaciones para que les guíes durante su aprendizaje. Hazlo con actividades temporalizadas en una semana como máximo, incluyendo el tiempo de explicación.
1. Dibujar líneas paralelas con la escuadra y el cartabón
La primera actividad consiste en que logren dibujar líneas paralelas con la regla, el cartabón y la escuadra. En primer lugar, y para que sepan cómo funcionan, pídeles que usen la primera para trazar una línea recta y después una paralela. Esto es lo más simple y la base de todo, así que comprueba que lo están haciendo bien y que lo entienden todo.
Lo que deben hacer después es utilizar los otros dos instrumentos con el objetivo de verificar que las dos rayas son verdaderamente paralelas. Para ello, pídeles que midan con precisión la distancia que hay entre sus dos extremos (de no ser así, explícales qué ha sucedido y retoma la presentación en la pizarra).
Luego, ve complicando la actividad y anímales a elaborar otra línea. En este caso, debe conectar los extremos superiores de las dos anteriores, para que luego hagan una cuarta que cierre el cuadrado. De nuevo, deben verificar que estas dos últimas son paralelas entre sí para saber si la forma geométrica ha quedado bien y entiendan lo que pueden hacer con unas simples líneas.
2. Hacer una figura geométrica simple
Esta segunda actividad plantea que creen una figura geométrica simple, como un hexágono (siempre en dos dimensiones, lógicamente). Con el cartabón y la escuadra, llegarán a recrear el juego de líneas paralelas que mostrábamos antes, pero ahora con seis lados y sin ceñirse a los dos extremos de las dos primeras líneas.
Como es algo más compleja, haz una demostración en la pizarra e invítales a que te sigan paso por paso. De este modo, podrás detener la dinámica si ves que algún estudiante está confundido. Guíales durante todo el proceso y asegúrate de que manipulan bien las herramientas, siempre con comodidad y agilidad.
¿Cómo lo complicamos después? Pasa de los hexágonos a los octágonos, e incluso a otras formas. Eso sí, resulta imprescindible que tengan siempre un número par de lados para evitar que no lo comprendan. Por ejemplo, vamos a obviar los pentágonos o los heptágonos, que no son tan fáciles de realizar.
3. Elaborar una composición con cuadrados y triángulos
Esta última actividad es idónea para que hagan figuras geométricas como en las dos anteriores, pero ahora con total libertad y creatividad. Haz una especie de competición, de modo que puedan hacer todas las que quieran sin límite alguno y con un lienzo grande, que puede ser un folio tamaño A2 o A3, preferentemente.
Para mantener un cierto orden, invítales a contemplar su composición cada ciertos minutos para que sepan si van o no por buen camino. Nuestra recomendación es que les invites a hacer una especie de paisaje tomando como base esas formas y, sobre todo, que les expliques cómo hacer un triángulo con las herramientas que abordamos.
Esperamos que, con el paso de las semanas, el uso de la escuadra y el cartabón deje de ser desconocido para tus estudiantes, incluso para los más pequeños. La mejor manera de que aprendan a usarlos es temporalizando las dinámicas en una o dos semanas, o tres si crees que no terminan de ganar agilidad con su empleo.
¿Se te ocurren otras maneras de emplear la escuadra y el cartabón para tus clases? ¡Cuéntanos en los comentarios y te leemos!