Murcia pone en marcha un programa para mejorar el rendimiento a través de las tutorías entre iguales
El investigador de la URJC, Ismael Sanz, y el consejero de Murcia, Victor Marín, en la presentación de Referen-T. © CARM
La Consejería de Educación ha anunciado la puesta en marcha de un programa de intervención educativa para mejorar el rendimiento escolar a través del ejemplo, tutorización y acompañamiento de los propios alumnos e implicando a toda la comunidad educativa del centro.
Los alumnos destinatarios de este programa son aquellos que estén en riesgo de repetir curso o de abandono educativo, mientras que los voluntarios que realizarán las tutorías serán estudiantes de bachillerato y de ciclos medio y superior de Formación Profesional o antiguos estudiantes del centro que estén realizando enseñanzas superiores. En ambos casos los seleccionarán los equipos docentes de los centros escolares.
El programa REFEREN-T se basa en la evidencia científica y forma parte de las políticas regionales de reducción del abandono escolar temprano, uno de los ejes estratégicos educativos del Ejecutivo regional. Se implantará de manera experimental en diez centros públicos de Secundaria en este curso y con la experiencia adquirida se desarrollará por completo en el próximo curso académico.
El consejero de Educación, Formación Profesional y Empleo, Víctor Marín presentó esta iniciativa, que “no solo busca mejorar los resultados y éxito académico, sino también fortalecer la integración social y el bienestar de los alumnos con la promoción de los valores de solidaridad que aporta la figura del voluntario”.
Marín destacó que el programa se basa “en la evidencia científica” tal y como argumentan estudios recientemente publicados como el meta-análisis del profesor Nickow, publicado Education Endowment Foundation o las investigaciones de las profesoras Carlana y La Ferrara, de las Universidades de Harvard y de Milán, respectivamente.
“El éxito de Referen-T se basa en la firma de contratos de aprendizaje que involucran a toda la comunidad educativa”, destacó el consejero, quien señaló que “se trata de un acuerdo conjunto de lograr el éxito escolar de los jóvenes”.
El contrato se firma tras un proceso de diálogo y consenso entre familia, profesorado, equipo directivo, alumnado voluntario y alumnado tutorizado, y en él se formaliza un compromiso de las familias con el éxito académico de sus hijos mediante la puesta en marcha de un acompañamiento y tutorización entre iguales, realizado por el alumnado voluntario del propio centro o por antiguos alumnos del mismo.
El acuerdo, que es individualizado para cada alumno, especifica los compromisos, que tienen que ser realistas y asumibles por las partes, en relación con el proceso de aprendizaje. El estilo de redacción del contrato debe estar basado en un lenguaje muy positivo y cercano, dirigido a transmitir confianza en la posibilidad de superar las dificultades, y así crear un contexto favorable para mejorar el éxito escolar del alumnado.
Entre estas actuaciones, las familias han de comprometerse a la asistencia de una tutoría trimestral con el profesorado participante, como parte del seguimiento del programa. El desarrollo del programa se realizará, preferentemente, como continuación del horario lectivo, realizándose la tutorización y acompañamiento en la séptima hora o bien en el horario vespertino.
Los alumnos voluntarios, que tendrán un máximo de seis alumnos, recibirán un certificado de participación que los centros podrán utilizar como criterio de desempate de las matrículas de honor que puedan otorgarse a los mismos. Asimismo, el profesorado participante recibirá una certificación de 40 horas en proyectos de innovación, mientras que el coordinador de cada programa recibirá una certificación de 50 horas en por el mismo concepto.
El consejero indicó que cada centro “recibirá un máximo de 1.500 euros para gastos de funcionamiento del programa de innovación REFEREN-T”.