Crónica de actualidad
La edición y la publicación digital de textos y obras, de distintos y variados ámbitos, es una realidad consonante con la preponderancia o extensión de lo que puede considerarse, sin entrar en detalles de su pertinencia, ya como era digital –tomado el tiempo o la época–, o ya como cultura digital –en este caso, asunciones, principios y valores–.
Las ventajas de acceso, disposición, archivo y consulta de los textos en edición digital son innegables, pero es asimismo apreciable una defensa sensata y juiciosa de la edición en papel, bajo la canónica forma de los libros. Sobre todo, si se trata de reunir trabajos o escritos dispersos, como en el caso de los artículos, y su procedencia, además de por la diversidad de revistas y publicaciones digitales, también está repartida entre distintos países. María Antonia Casanova así lo entiende y justifica en la presentación de su libro Educación: Crónica de actualidad, publicado el pasado mes de febrero por la Asociación Cultural y Científica Iberoamericana (ACCI). Se trata de una colección de treinta y cuatro artículos, además de algunas breves impresiones, cronológicamente reunidos desde diciembre de 2021 hasta diciembre de 2023, escritos al reclamo de la actualidad y con la intención de ofrecer análisis, ideas y propuestas.
Ciertamente, no escapará a la autora que tan actual Crónica tiene –más bien tendrá– no poco de relativa, dado que los modelos, las regulaciones, las opciones, las circunstancias o los asuntos educativos contemporáneos acabarán siendo revisados, modificados o sustituidos no muchos años adelante. Incluso aunque, al cabo, solo fuere para cambiar el nombre de las cosas que permanezcan. Ya que así ocurre, sobre todo en materia educativa, cuando se necesitan expresiones o conceptos “señaladores” de las innovaciones, reformas o cambios que no lo son de manera genuina, sino remoción de pretéritas concepciones. “¿Cambiar los nombres para que todo siga igual?” se pregunta la autora en uno de sus artículos.
Tal carácter relativo, empero, no resta valor a la Crónica referida, sino que le atribuye, además, el valor de reunir una constancia fundamentada de la actualidad educativa, favorecedora del debate y el análisis crítico, tanto en su tiempo propio, el actual, con en el venidero, cuando precisamente los aprendizajes en la era digital –primero de los artículos compilados en el libro–, la atención a la diversidad, la inclusión, el Diseño Universal para el Aprendizaje, las políticas educativas, el desarrollo curricular, los distintos ámbitos de la evaluación, la innovación, la formación docente, la supervisión educativa, la globalización, la incertidumbre, el acoso, la violencia de género o los suicidios tengan o no parecida relevancia, reciban o no el mismo nombre, acaparen o no la misma actualidad, o evoquen un tiempo pasado que, sabido deber ser, no siempre fue mejor, sino distinto, y conviene disponer de las páginas de los libros para apreciarlo en sus precisos términos.